Novato en los blogs, recuerdo la gracia que me causó esta imagen de Derek Dice:
Julito Cleto ya había perpetrado su defección. No sólo traicionó al oficialismo, sino también a los pequeños productores sojeros a los que la resolución 125 hubiera beneficiado. Los sojeros le pusieron "Cleto" a una mascota en la Rural y el Establishment ya tenía a su representante.
Pero resulta que el tiempo pasó y la nafta de la 125 se va acabando. Cobos cae en las encuestas y, necesitado de combustible, The Great Argentinian Newspaper y La Nazión le prestan primeras planas para lavarlo un poco, por el papelón que significa modificar un impuesto con mayoría simple cuando la Constitución manda que debe ser por mayoría absoluta.
Aníbal Fernández dijo: "Todo lo que Cobos dice, lo dice como si fuera Heidi, desprovisto de toda responsabilidad".
Hoy en La Nación: Duras respuesta del Gobierno a las críticas de Cobos: pide que renuncie.
Pedirle la renuncia a Heidi, digo Cobos, es un error. En un primer momento su actitud fue vista como valiente y desinteresada. Hoy todos saben que es un candidato opositor. Chau aura de héroe, hola político embarrado y, para peor, medio inutilongo, porque hasta ahora no concretó nada de lo que insinuó. Por eso, desde este blog le decimos:
Y también decimos:
Porque no andamos con medias tintas. Si no renuncia Cobos, no renuncia nadie, loco.
No hay nada más peligroso que un inútil devenido en inteligente por imperio de los necesitados de un chorlito que les haga el trabajo sucio. Y este Cleto que maldita sea la hora que Nestor se lo cruzó!, es un claro ejemplo: en cuanto vió un resquicio, la cucaracha acomodó el cuerpo y salió a la superficie. Pero coincido: si ahora renuncia, será una víctima. Hay que dejarlo que se incinere hasta el final, aunque después del mendocino quede tierra arrasada...somos muchos para juntar los platos rotos y aprender que una cosa es transversalidad y otra diferente es agarrar al más tonto de la clase, creyendo que será manejable.
ResponderBorrarSeguí, Cleto, que la historia te va a recordar .... nos ocuparemos de eso.
acaba de acertar!
ResponderBorrarNo hay nada mejor que Cobos siga en este lugar que tiene ahora, bien metido adentro del barro y sin poder jugar al mudito. Por este camino, hasta el voto no positivo va a ser ubicado por "lagente" como una agachada más
Que llegue bien quemadito a 2011, chela.
ResponderBorrarSegún tengo entendido, la elección de Cobos tuvo que ver con que era el único Gobernador radical K que no podía aspirar a la reelección.
JEP: triste tratamiento le dará la Historia. A Julio A. Roca (h), vice de Justo, se lo recuerda todavía por el pacto Roca-Runciman y su frase: "la Argentina, por su interdependencia recíproca es, desde el punto de vista económico, una parte integrante del Imperio Británico".
Cobos es el timorato ideal de Clarín para tener un gerente rentado de nuevo en la Rosada a partir de 2011. A Néstor se lo bancaron por el momento en que Néstor asumió y nada más. El error de Néstor fue creer que ese "te dejamos hacer", era un "estamos con vos". Ya está, no vamos a andar llorando sobre la leche derramada.
ResponderBorrarMás que renunciar, le pediría a Cobos que asuma. Que asuma su cargo, el que le dimos yo y 8.999.999 argentinos más, y que se suponía era para acompañar a la Presidenta de la República, no para liderar la oposición ni líneas internas de pensamiento libre. Asuma, pues, Ingeniero, el mandato que le hemos dado, pero al pie de la letra, no lo ande interpretando. Lleva más de dos años de mora, pero aún está a tiempo.
Lo que me has hecho reír con las fotos de las Heidis.
ResponderBorrarMuchos saludos.
Pablo: lo deben haber visto -olido casi- de lejos y deben haberse relamido de la emoción, ¿no?.
ResponderBorrarEse discurso de madrugada, previo al voto no positivo, lo pinta de cuerpo entero a él y al imaginario al que apelaba: hombre de familia, de consenso, honesto con sus convicciones. Le faltó decir que iba todos los domingos a misa y salía con fritas.
Yo no esperaría parado que asuma su cargo. Tomá una silla y cebá mate. ;)
Jorge: me alegro mucho. Esa era la idea.
Yo parecía loco malo riéndome solo mientras las hacía.