lunes, 23 de julio de 2012

El kirchnerismo tiene quién le escriba


La potencia cultural del kirchnerismo será, sin ninguna duda, uno de sus legados más importantes. No es -y no será, porque aún se desarrolla- escaso el material que este proyecto político entregará a historiadores y sociólogos. Tendrá, como todos los procesos, aristas afiladas pero, además -y esto sí presenta ribetes inéditos-, será también una historia de superación y triunfo; es decir, el kirchnerismo puede tener deudas, y hasta los militantes de este proyecto podrían decir que son muchas, pero la épica, entendida como ese género que narra acciones extraordinarias dignas de ser recordadas, no será una de esas deudas. Esa épica es quizás, pero no sólo, uno de los grandes temores del establishment económico (y culturalmente mitrista), y una de las razones por la cuales el proyecto nacional y popular encarnado en este momento histórico recibe virulentos ataques desde la prensa otrora hegemónica.

Si realizamos un ejercicio comparativo, en términos políticos y culturales, entre alfonsinismo, menemismo y kirchnerismo (el duhaldismo mal puede ser entendido como proyecto político más allá de los límites del peronismo de la provincia de Buenos Aires, y siempre bajo la tutela del menemismo cultural), no resulta difícil encontrar líneas que confluyen y otras que divergen. Entre las que confluyen con el kirchnerismo podemos citar, del primer alfonsinismo (el de la primavera democrática), a esa corriente de esperanza que le permitió a la sociedad argentina navegar fuera de las aguas sangrientas de la última dictadura; con el menemismo, al kirchnerismo lo emparenta esa peronista vocación de poder. Entre las líneas que divergen, y siguiendo con este esquema por demás resumido, el alfonsinismo fue la historia de una derrota cultural y el menemismo, el menemismo fue la globalización devorando las líneas del peronismo histórico. El alfonsinismo tuvo quien le escribiera, el menemismo tiene viudas escribiéndolo, todos en la vereda de enfrente del kirchnerismo.

El kirchnerismo, el kirchnerismo tiene quién le escriba. En sus primeros años fue Clarín (como ocurrió con todos los gobiernos, enmarcado en aquello que Fontevecchia calificara como política procíclica del que alguna vez fuera el gran diario argentino) pero, una vez producida la ruptura, cuando se da inicio a eso que el kirchnerismo llama la resistencia, fueron, fundamentalmente, los blogs: la blogósfera nacional y popular, porque no es únicamente peronista. Este, Los Huevos..., llegó en 2009, pero antes estuvieron Lucas, Artemio, Diego F., Manolo, el Ingeniero, Abel, La Barbarie, Artepolítica, el Criador de Gorilas, por nombrar sólo a algunos, los primeros. Para quienes recorren los blogs, estos nombres no necesitan presentación. Los blogs tuvieron una importancia superlativa en términos culturales, peleándole al sentido común de los medios opositores, claro, pero también fueron fundamentales en la generación de debates y un termómetro muy ajustado del clima político.

Mientras el establishment apela a los lugares comunes en sus editoriales periodísticos o a libros mediocres como los de Majul, Tenembaum, Aguinis o Sarlo (la sección de su libro dedicada a los blogs está plagada de miradas miopes), el kirchnerismo tiene la potencia de lo nuevo, de lo plebeyo sin los corsé publicitarios o académicos. La historia de los blogs será, entonces, también, parte de la historia del kirchnerismo. Una historia que relatará mi amigo Aldo Jarma próximamente en su libro "Destripando lo sagrado. Génesis, resistencia y triunfo de los blogueros nacionales y populares". No les voy a mentir: soy una de las dos personas, fuera de su autor, que leyó el borrador final. Y puedo adelantarles que se trata de un libro brillante. Lucas Carrasco nos cuenta también que pronto editará un libro, "Me tienen harto con el kirchnerismo". Si algo podemos asegurar, es que será polémico. Y polisémico. Como los blogs. Porque el kirchnerismo tiene quién le escriba.

34 comentarios:

  1. Esperamos el libro que suponemos podremos descargar ¿verdaaaad no?

    Creo que la gran ruptura esta dada en que los intelectuales (¿y por qué no llamarlos así?) de la red hicieron una ruptura cultural por dos motivos: uno el soporte, accesible a todos y distribuido, descentralizado.

    El otro es económico, no viven de escribir. Por lo tanto no tienen que contentar humores editoriales. No los corre el miedo, tampoco el deseo de estrellato rutilante como a Lanata o Caparros.

    Da para mucho el tema. Disfruten el viaje.

    ResponderBorrar
  2. Y es que contrariamente a la idea lanatiana la blogósfera Nac and pop tiene de todo (peleas internas incluídas, peronómetro en mano inclusive). Eso la da su riqueza...
    Espero leer el libro de tu comprovinciano en su momento. Y sí, creo que a Lucas Carrasco la polémica le gusta más que el dulce de leche, pero menos que las mujeres, o algo así, no sé...

    ResponderBorrar
  3. Daniel: da. Nosotros, los intelectuales de la red (ja), además, contamos con algo bastante escaso del otro lado: convicciones por un horizonte de igualdad y justicia. No es poco. Más cuando del otro láu, las convicciones tienen distintas denominaciones pero mejor si vienen de color verde.

    Aldo: iban a continuar los elogios, je, pero para eso tendría que haber adelantado algo del libro. Y el amor es antes deseo, así que mejor dejarlos con la intriga.

    Iris: peleas, peronómetro, amores, amistad. Parecen ingredientes para una buena novela.
    Respecto a Lucas, no sé si le gustan más las mujeres que la polémica, ¿eh? Je.

    Abrazos.

    ResponderBorrar
  4. No te parece que la mayor parte de lo que se escribe es bardear a la oposicion ? Digo no se esta exagerando la batalla semiotica mientras hay una absoluta falta de desarrollo teorico de que seria el kirchnerismo ? Es mas porque se escucha cada vez mas en Cristina y tambien en la Campora el hablar de peronismo y no de kirchnerismo ? Solo por la interna con Moyano ?
    El kirchnerismo es solo gestion ? Como puede perdurar el jkirchnerismo en el tiempo con una dirigencia sumamente oportunista ( ej el Evita tranzando con Scioli por cargos trabnquilamente podria tranzar con Scioli si este fuera presidente ) ? No me resigno a que el pragmatismo el pragmatismo termne destruyendo todo como ocurre siempre con la mierda del pragamatismo como ya les ocurrio al propio peronismo , al pri , al apra , al mnr o al varguismo en brasil

    ResponderBorrar
  5. Algo así como la potencia de fuego yanqui y el ingenio vietnamita haciendo túneles por toda la selva¿no?

    ResponderBorrar
  6. Javier: los blogs son más de trescientos. Hay de todo: los que bardean a la oposición, los que hacen "festejismo", los que sólo se ocupan de Clarín y también hay muchísimos que analizan la coyuntura, dan debates históricos, teorizan acerca del futuro o tratan de deglosar qué es esto que se llama kirchnerismo.

    Respecto a lo de la dirigencia oportunista, creo que Sarlo te puede responder más acabadamente, cuando llamaba a los opositores a hacer oportunismo. Es decir, a aprovechar las oportunidades. ¿Cuál sería la otra? ¿Ser una izquierda democráticoburguesa testimonial? Je.

    Y si hablamos de pragmatismo, no se salva ni el buenazo de Jesús. ¿O no fue pragmático el PT cuando transó con Serra para que finalmente pudiera llegar Lula? ¿No es pragmático Chávez cuando le vende petróleo a EE.UU.? ¿Raúl Castro ahora, recibiendo al Papa y abriendo Cuba tímidamente no es pragmático? ¿No es pragmático Sabbatella?

    Abrazo.

    ResponderBorrar
  7. Moscón: a mí me decían que parecía chino cuando chico.

    ResponderBorrar
  8. Bueno, ahora el problema es que el kirchnerismo es un "pragmatismo" y no es una doctrina, una filosofía, un discurso.... etc. ¿podría agregar que, en tanto pragmático, es menos franeleo teórico y más transformación concreta de la realidad argentina?, o no se puede, porque Forster no llega a Aristóteles?.
    A mí, que hago calcomanías, nunca deja de sorprenderme la "necesidad" de etiquetar todo, especialmente aquello que no está terminado, como el kirchnerismo, afortunadamente. Lo dificil, hablando de calcomanías, es hacer la primera, después ya es goebbeliano el proceso, se repite y repite.
    El kirchnerismo daría para muchos modelos de calcos, algunas llenas de colores, otras fuleras directamente y muchas maumenos y, mañana, bueno, mañana habría que hacer otras.
    Tengo la sospecha de que cuando se le exige "denefiniciones" al kirchnerismo, en realidad se están buscando chamuyos entre amables y lógicos para descalificarlo, para descubrir que es "más de lo mismo" y que no vale la pena - ¿cómo va a valer la pena si no es un progresismo puro, una izquierda purísima y una filosofía, tan indiscutible como angelical? - Ah, y sin olvidar la garantía extendida y los manuales de uso y de servicio técnico.
    ¿Se imaginan al libro de Aldo como un catecismo bloguero K?, a Lucas Carrasco como curita repartiendo hostias y absoluciones?.
    Sería algo tan fulero y tan poco pragmático que los talibanes K se indignarían, no?

    ResponderBorrar
  9. vamos a comprar los dos libros en papel, que tanto!

    ResponderBorrar
  10. Explicitar seria darle contenido preciso a profundizar y decir que seria el kirchnerismo sin Cristina ni Nestor

    ResponderBorrar
  11. ram: el goebbeliano proceso de hacer calcos. ¡Jaaaa!

    Estamos en todo de acuerdo. Son tranquilizadoras las definiciones, algo de lo que hablaba en el posteo de ayer respecto a la queja. Son estáticas y no permiten que algo distinto a lo que contiene salga o entre. Ahora, la realidad, por lo general, tiene la jodida costumbre de rebelarse e ir por dónde se le canta. Pero de todas maneras no significa que al kirchnerismo le falten definiciones. Más bien creo que la crítica de Javier va por el lado de que le "sobran" algunas definiciones molestas. Y está bien que señale esas definiciones, ¿por qué no? Pero bueno, viste que los provincianos a veces optamos por dichos medio gauchescos en lugar de definiciones teóricas académicas. Bueno, uno podría ser "si te gusta el durazno, bancate la pelusa", je.

    Nilda: no diga eso, que me tira abajo el personaje de bloguero K que es, por definición, rentado y clientelista: tendría que exigir que Aníbal Fernández, o alguien, Abal Medina, le regale los libros.

    Abrazos.

    ResponderBorrar
  12. Javier: definir sería entonces decir kirchnerismo es esto, esto y esto y el que quiera hacer otra cosa no es kirchnerista. Es decir: inventar el kirchnerómetro, je.

    Hay que ver si Cristina pasa la prueba de la blancura K, ¿eh? Néstor no la hubiera pasado. :P

    Abrazo.

    ResponderBorrar
  13. Definiciones para mi son que tipo de control debe desempañar el estado sobre la participacion privada en la economia , por ejemplo
    La critica viene porque todo se determina por el lider y si el lider falta parece existir un vacio total , entonces dependera como sigue la historia del nuevo lider ?
    Que estamos haciendo para que dependa de las ideas y no de las personas ?

    ResponderBorrar
  14. Digo Eduardo Aliverti le dijo a VHM que la revolucion bolivariana sin Chavez no existe , que esta diciendo que todo lo que se hizo tiene patas cortas ?

    ResponderBorrar
  15. Reproducir algo hetereo como peronismo y radicalismo nos llevara nuevamente al que se vayan todos mas temprano que tarde , como el PRI o el APRA

    ResponderBorrar
  16. No, Javier, ni PRI, ni APRA ni ningún otro sello extinguido hace rato.
    Acá hablamos de algo que se está haciendo y no precisamente en un laboratorio o, en el sofá de un filósofo mientras medita.
    Algo que se está haciendo en inferioridad de condiciones, en terreno minado y bajo fuego cruzado; algo que además se debe más a la casualidad que a la lucha popular, nadie, o casi nadie, apostaba a que apareciera un tuerto resuelto a no tirar sus convicciones a la basura y ser un presidente "previsible".
    Si su paladar es de gourmet, se equivocó de menú, el kirchnerismo es un guiso que se hizo y hace con lo que hay, con ingredientes de primeras marcas, de segundas o terceras y algunos con fecha de vencimiento pasada... usted quiere todo prolijito, guionado y con modales de salón. Bueno, no hay stock, hay una pelea callejera y con rivales que no le hacen asco a nada - un moyano, digamos - y siempre, pero siempre, eh!, portadores de ese pragmatismo que se explica con dos palabras dos: guita y poder.
    ¿No quiere pragmatismo?, bueno, hágase su partido, movimiento, grupo, grupúsculo, célula, "la hansel y gretel" por ejemplo, pero no pretenda que los demás hagan lo que a usted le parezca; menos sabiendo, como debe saber, como son quienes están hoy en este gobierno. Lo toma o lo deja, que los gatos sólo tienen 4 patas, los huevos son pelados y los reyes magos son papá y mamá.

    ResponderBorrar
  17. Javier: no creo que fuera la "eteriedad" del peronismo o radicalismo lo que llevara al "que se vayan todos". Más bien fue el sometimiento a los dictados externo, sometimiento que venía de la mano de ataduras varias. La deuda externa entre ellas. Los ciclos históricos tienen esas cosas.

    No existirá nunca un Das Kapital kirchnerista, porque ni siquiera La Comunidad Organizada o la Constitución del '49 guiaron al peronismo o al propio Perón, fijate vos.

    ram: me gustó "La Hansel y Gretel". La deberíamos fundar. La macana es que se nos sumarían varios/as impresentables y de entrada nomás, je.

    Abrazos.

    ResponderBorrar
  18. El debate es rico. Cuando dijo que Cristina no pasaría la prueba de blancura K, recordé lo de la biografía de Charles Chaplin, que cuenta que en un concurso de parecidos a Charles Chaplin, en Londres, salió segundo. (Me fui de tema)
    ram: sus argumentos son muy sólidos. La imagen de guiso que se hace con lo que hay, es muy gráfica. Algunas veces uno lamenta tener la heladera algo desprovista, pero hablo de zurdo testimonial, nomás -que cocina con lo que hay-. Me gusta mucho su estilo.
    Un movimiento histórico político y social siempre está en construcción, si no, se muere. Y la blogósfera K es algo para estudiar, y si no... algo para disfrutar.

    ResponderBorrar
  19. Sudaca: y la construcción implica echar mano a distintas herramientas de acuerdo a las necesidades.

    Es buena la anécdota chaplinesca, y el que salió primero debe haber sido más chaplinista que Chaplin, je.

    Abrazo.

    ResponderBorrar
  20. Claro Ricardo , de acuerdo a las necesidades se podia privatizar con Menem y estatizar con cristina y no sabemos si viene otra ola de derecha se vuelva a privatizar , de hecho ese fue el alegato de Picceto en el senado frente a la recuperacion del 51% de YPF , depende del contexto historico lo que se haga , la utopia gestionaria

    ResponderBorrar
  21. Por que el kirchnerismo ha sobrevivido a tantos pronosticos agoreros en el tiempo?

    Simple: porque es DINAMICO y no se ata a RECETITAS TEORICAS INAMOVIBLES.

    Lo unico constante, constante, son tres objetivos claros: soberania política, independencia económica y justicia social. Esas son las tres grandes definiciones que ha tomado el kirchnerismo como bandera irrenunciable, y es lo único constante y estático e inamovible.

    Lo demas es el "como", y ahi viene el pragmatismo. Que es lo que lo hace tan poderoso como herramienta de transformacion. A diferencia de los liberales o los troskos, no nos atamos a una recetita inclaudicable de pasos que "si o si debe cumplir en cada uno de los momentos, o no se es tan puro como debería" para "hacer las cosas bien". Todo lo contrario. En cada instante se evalua el contexto, se evaluan fortalezas, se evaluan debilidades, se evaluan amenazas y oportunidades, y se traza el camino que aparece como más conveniente para lograr un avance en la direccion deseada de los tres objetivos clave. Que herramienta se elige? LA QUE GARANTICE MEJORES RESULTADOS. "Ah pero eso es de derecha", y, me importa tres pitos si es una herramienta que se invento el propio adam smith en un transe lisergico, si es la mejor para encarar un cambio en nuestra direccion, en el contexto que hoy tenemos, y bueno PARA ADELANTE. Y lo mismo cuando resulte mas conveniente una medida ultra marxista-anarco-leninista-castrista-guevarista: a cagarse, para adelante a fondo, llore el liberal que quiera.
    Por eso nos putean todos los puristas, de derecha y de izquierda, tan aferrados a su recetita, tan encorsetados que no entienden que la mejor herramienta es siempre la que mejor resuelve el problema, no la que tiene formita que mejor se ajusta a mi mano.

    Para ponerlo en terminos metafóricos, a mi podra gustarme mucho un destornillador phillips que tengo, anatomico, cómodo, pero a la hora de sacar un clavo, a la tenaza no hay con que darle.
    Cuando nos piden definiciones, marco teorico y demas verdura, lo que quieren es que enumeremos las herramientas que estamos dispuestos a usar (y por lo tanto, que dejemos en claro cuales NO VAMOS A USAR NUNCA). Y para que quieren eso? para hacernos PREDECIBLES (es por eso que han fallado todos los planes economicos anteriores: es jugar al truco mostrandole tus cartas al adversario).

    Así fue siempre, venia alfonsin y te largaba el plan austral, donde enumeraba todas las herramientas que pensaba usar y bajo que condiciones. Y el plan era sagrado y habia que mantenerlo, "porque sino no hay seguridad juridica". Ahi nomas iban todos los chupasangres a ver cual era la mejor forma de "atacar" el plan, qué debilidad tenía cada una de las herramientas, y cual era la mejor estrategia para sacarles beneficios para ellos a costa del pais. Y a la mierda todo denuevo, porque "el plan hay que mantenerlo", aunque las variables cambien, aunque las herramientas ya no sirvan, todo estático tratando de enfrentar situaciones dinamicas. Y el resultado siempre el mismo: perdiamos como en la guerra. A eso nos quieren llevar de vuelta los que nos piden definiciones y marcos teóricos, modelos y planes estructurados: quieren saber que vamos a hacer y cómo, quieren nuestro manual de instrucciones, para poder asi DESTRUIRNOS. Bueno, que la sigan mamando.

    quieren la definicion concreta del kirchnerismo? ahi va: El kirchnerismo es eso: tres objetivos bien definidos, y un módulo de selección óptima de la herramienta apropiada en cada momento para acercarnos a esos objetivos. Mas claro imposible. Y tambien, mas desesperante imposible (desesperante para aquellos que solo quieren destruirnos en su propio beneficio, y no pueden predecir "con que nueva maldad les vamos a salir" para cagarles los planes).

    ResponderBorrar
  22. Javier: no se si utopía gestionaria. Más bien real politik. En algunos posteos ya hablé de estos temas y decía que tomar en cuenta los contextos históricos no disculpa al menemismo por la entrega. Todos los países latinoamericanos adhirieron al Consenso de Washington, post caída del Muro. La diferencia estuvo en el nivel de "relacionismo carnal". Pero lo importante es aprender de esas experiencias históricas, y creo que en el peronismo no deben ser muchos los privatistas o dolarizadores. Depende, también, claro, de otros factores como nivel de "amistad" con la "Embajada".
    Entiendo adónde apuntás, y coincido en muchos casos, pero no adhiero al purismo metodológico porque, en definitiva, ese purismo mismo abrió espacios para que otros pudieran poner en práctica el neoliberalismo al palo.

    Abrazo.

    ResponderBorrar
  23. Leandro: brillante.
    Vaya desde acá mi aplauso.

    Abrazo.

    ResponderBorrar
  24. Claro, Javier, porque ya sabemos lo bien que les fue a los sistemas políticos basados en la entronización de ideologías pretendidamente "científicas", rigurosamente elaboradas y permanentemente "actualizadas" en las Academias y los Congresos número N del Presidium del Comité Central del Soviet Supremo del Partido. Si falló fue culpa de las "desviaciones", "los excesos" (como dirían los videlistas), "la burocracia", el "estalinismo". Pero si hubiera estado Trosky, todo hubiera sido de 10 ¿no?

    En cambio, el sucio populismo de negros falló porque no tiene ideología, porque es "una bolsa de gatos". Ojo, eh? la adopción simultánea del ultraliberalismo por absolutamente todos los gobiernos del mundo (incluyendo los que hasta un día antes se declaraban súper-marxistas-leninistas) no tuvo nada que ver, eh? cómo se te ocurre!

    ResponderBorrar
  25. El kirchnnerismo no llegó a poner en marcha un programa sino dispuesto a desmontar la densa trama política, económica y cultural tejida durante décadas por el neoliberalismo en nuestro país. Había nudos gordos, muy visibles: la deuda externa, por caso, o la impunidad de los genocidas. Pero luego aparecieron otros, como la pobreza irreductible pese al crecimiento del empleo. Y allí el kirchnerismo aceptó, a regañadientes, que debía apelar a la ayuda social directa (AUH), hasta donde yo recuerde la medida que Cristina presentó como menos entusiasmo y más reservas. Como se dijo antes, la experiencia K se atuvo a las tres banderas históricas del peronismo, y allí está un núcleo duro. El resto fue “reparar un barco en el medio de una tormenta” y hasta hoy sigue siendo así. Se trata, obviamente, del curso de una experiencia populista, la cual otorga una centralidad decisiva al líder y ciertamente afronta un problema a la hora de proponer un relevo. No se conoce, aún, un manual que resuelva esta cuestión, lamentablemente. Un abrazo.

    ResponderBorrar
  26. Sanín: tanto Néstor como Cristina se resistían a la AUH. Veían en el empleo al elemento reparador, transformador. Pero cuando vieron que el empleo se encontró con una pared, supieron llevar adelante la medida.

    ResponderBorrar
  27. Muy buena intervención la tuya, Leandro. Si hay algo que el kirchnerismo sabe usar a su favor y de manera espectacular es el uso de los tiempos políticos, la elección de los rivales del momento y el factor sorpresa. A mí no me interesa si me llaman facho o zurdo (que es lo que me pasa por ser K. Para algunos soy un bonapartista, un reaccionario y para otros un bolche). Lo único que me interesa es que la guita la sigan poniendo los que nunca la pusieron (y todavía faltan ser tocados varios factores de poder, pero poco a poco confío en que el gobierno los va a ir acomodando de a uno en uno) y que la industrialización y el proceso de recuperación de soberanía continúe.

    ResponderBorrar
  28. Tal vez no esté de más recordar la diferencia entre partido y movimiento. Los movimientos se están moviendo (perdón por la rebusnancia). Para ponerle nombre a las cosas hay que esperar que se queden quietas. Las definiciones, las teorías, precisan de la distancia y del tiempo.
    Los cartesianos separan la teoría de la práctica. Habría una teoría buena y un buen gobierno, o un buen técnico que aplica la teoría del buen científico/filósofo. Pero Marx propuso praxis, una palabra que junta las dos cosas. Algo algo así como teorizar haciendo. Y acá hablamos de algo vivo.
    Las categorías sociales y políticas quedaron viejas, pero uno ha sido formateado por ellas. Algunos necesitan aferrar las cosas a nombres para sentirse seguros.
    Tengo una relación difícil con el kirchnerismo. Y cuando me hace calentar, es porque se aparta de esas banderas que son las que se están enarbolando como núcleo duro. Por poner un ejemplo doloroso, la ley de antiterrorismo es más una concesión para ser miembro del G20 que para ser coherente con la bandera de soberanía política, a la vez que, pareciera que ser miembro, nos pone en un mejor lugar en "el mundo" y eso beneficiaría a tod@s: la realpolitik de Ricardo. La negociación es entregar algo que no importa tanto a cambio de algo que nos importa mucho en un movimiento tal, que las dos partes se sientan beneficiadas. El punto está en los valores que se ponen en juego a la hora de negociar. Ser árbitro entre el trabajo y el capital, que ganen todos (justicia social, que le dicen). El purismo no negocia y la política es esencialmente un proceso de negociación. La ciencia quiere conocer, la política, transformar (no solo gestionar y mal Danielito).
    Algunas veces dudo (resabios cartesianos), cuando el guiso tiene demasiado gusto a sapo.
    Hay algunos mocos y millones de aciertos. Este gobierno me hace feliz y algunas veces me hace calentar. Pero estoy dispuesto a pelear por él y salir a la calle cuando haga falta.

    ResponderBorrar
  29. JP: claro que si. Eso define al kirchnerismo (y al peronismo no menemista, je): que la guita la pongan los que tienen más y no los que tienen menos, aunque sean más y por ahí se note menos (cuando no se cabrean y se ponen insurrectos).

    don Sudaca: muy buen aporte.
    Hay una frase de Perón que citan siempre y es que en una negociación, uno se tiene que quedar con el 50% más importante, je.

    Abrazos.

    ResponderBorrar

Se agradecen todos los comentarios con ganas de aportar. Los que insultan serán automáticamente borrados así el autor sea Obama. Y a quejarse a La Haya, loco.