Un sol. Un sol para los chicos.
Ningún sector de la oposición puede tan siquiera insinuarle al ochoeneísmo cacerolero capacidad para canalizar sus heterogéneas demandas en elecciones democráticas y, menos aún, luego, en el ejercicio del poder. Para eso querían inventar el Properonismo o, más tarde, al Peronismo Federal Republicano Liberal Libertario y Clarinista. Al Grupo A, en definitiva, ya que el radicalismo, socialismo, pinismo y victoriadondismo eran funcionales a la estrategia. ¿Qué estrategia?: erosionar al poder político; sí, en este caso kirchnerista, pero la erosión de uno afecta a todos, incluyendo al que vendrá mañana. No ocurre el fenómeno decartista de tabula rasa una vez que un nuevo gobierno nace: si el poder en manos del Estado es malo con Cristina, continuará siéndolo con Macri en el gobierno, los dueños de la Argentina en el poder.
Sólo que ya no lo dirán.
Otrosí: el 8N no es espontáneo, aunque algunos piensen que se suman espontáneamente. La espontaneidad como valor. Posmoderno. Opuesto a la necesaria organización. Aunque la cartelería callejera (sin firma; convoca el Espíritu Santo) no sea barata. En fin, ya muchos, incluidos los medios opositores, desnudaron a los encargados de organizar la espontánea movilización. Alguien que no puede ser sospechado de cristinismo como Jorge Asís realizó un resumen en su portal [1]. Se sabe ya que hay fundaciones neoliberales atrás, que partidos políticos, aunque pretendan no figurar, también estarán movilizando: el PRO, algo del radicalismo. También sectores sindicales opositores y, claro, el apoyo y fogoneo mediático aportado por quienes nada inocentemente relacionan al 8N con el 7D: un caceroleo masivo clausura el 7D, piensan. Es decir, la plena aplicación de la Ley de Medios. Se desilusionarán cuando, una vez caída la cautelar, el gobierno no haga más que hacer cumplir la ley. Gobierno corrupto y chavista que quiere hacer cumplir las leyes como si estuviéramos en... EE.UU. o cualquier otro "país serio".
Una marcha por la Libertad para evitar que una ley democrática y republicana afecte a un grupo concentrado mediático, financieramente diversificado y parte fundamental de nuestra oligarquía. No me digan que, si no fuera trágico y triste, no sería simpático; al modo en que los chicos son simpáticos cuando hacen macanas.
Un sol. Un sol para los chicos que continuará en la segunda parte...
[1] http://www.jorgeasisdigital.com/2012/10/19/el-7-d-depende-del-8-n
* Fe de ratas: ahí donde dice "fenómeno decartista de tabula rasa" debiera decir "fenómeno johnlockeista de tabula rasa". Descartes lo... descartó :P
ResponderBorrarQuedamos en la disyuntiva,si lo ninguneamos quizás subestimamos en esta muestra de fanfarria los intereses entregadores de siempre,si le damos bola reconocemos la potencia del peligro.
ResponderBorrarPor un lado existe la antipatía visceral de los oligarcas y su pelotuda claqué,por otro,y este es el importante,los sectores mediopelo carentes de capacidad de entender que serruchan la rama en donde están parados vaya uno a saber porqué carajo se le distorsiona la cosmovisión y se convierten en una enfermedad autoinmune.
Lo importante es el siete de diciembre cuando la movilización la marca la Ley,movilización de capitales,de agentes de propaganda y la feroz compulsa interna de los heraldos.
De última,no seamos cómplices en contra nuestra la convocatoria de la cornetita.
Moscón: hay mucho de sensación en los sectores mediopelo. Y no es sólo la falla "relatística" del gobierno. Hay algo que tiene que ver con el tercer período, gobierno peronista, el relato político, contra las corporaciones...
ResponderBorrarAbrazo.