¡A ustedes también, tallarines! A los agnelottis no porque son muy ricos y a Horacio González tampoco porque votó a Scioli desgarr... Uy, ¿estaban ahí? Disculpen, practicaba mi discurso para captar voto massista.
Llegó el ballotage, un invitado que podía estar en los planes, claro que no acompañado de sus amigos Perder la PBA con Vidal y el 2,5% de diferencia en la presidencial. Ya en el post anterior intentamos exponer algunas razones, como la voluntad de cambio en la sociedad —mayor de la que todas las encuestas y hasta las PASO permitían presumir—, algo de voto bronca escondido en PBA y una dinámica que no se instala o modifica durante el tramo electoral sino que es producto de un goteo y decantación más lento y tiene huellas durante el último cuatrieno y hasta en los últimos diez años luego de que Cristina y Néstor derrotaran al duhaldismo para hacerse con el aparato de la única Provincia que en los medios se resume con mayúscula.
A propósito del aparato y los cortes de boleta, tengo la impresión de que se están haciendo los rulos hablando de traiciones, cuando lo cierto es que la gente corta boleta. Ocurrió en PBA pero también en Tucumán (33 mil votos menos a senador). En Santa Fe (24 mil votos menos a senador, rubro que se ganó mientras a Presidente ganó Macri) y en Entre Ríos (9 mil votos menos para Presidente, rubro que ganó Cambiemos mientras para gobernador fue triunfo del FpV). Ocurrió a lo largo y ancho del país. En ese sentido, esta elección tuvo algún viso de contienda legislativa. Para ilustrar con una anécdota, unos amigos jujeños, filoperonistas, me adelantaban la extraña alquimia del voto que pensaban emitir: intendente FpV - gobernador UCR - presidente FR. ¿No piensan que la gestión municipal que consideran buena tuvo relación con el gobierno provincial y nacional?, les pregunté. No los incomodó ni tampoco les importó: el componente emocional es más fuerte.
Hay algo del orden de lo emocional que llevó muchos votos al barco macrista. Magia, como en un crucero de quinceañeras que embarcan a Miami. No ocurrió así con el voto FpV y es uno de los déficits más importantes, en mi humilde opinión. Si rebobinamos, Macri no propuso nada. Ni 82%, Ganancias o bajar retenciones. Sólo levantar el cepo el 11 de diciembre y allá lejos en el tiempo. Luego propuso un sueño. O dos. Uno implícito: desalojar al kirchnerismo; y fue el que más votos le ofrendó. El otro fue más efectivo para sumar esos votos extras con los que sorprendió: propuso pertenencia, identificación. Vení que acá está la alegría, lo nuevo y lo distinto. El colchón de estabilidad que deja el kirchnerismo habilita el salto de fe. Si 2011 fue para el oficialismo la campaña del amor, 2015 pareció la del amor otoñal. Mientras Scioli hablaba de desarrollo, industrialización, mercado interno y AUH, Macri ocupaba espacio en la agenda con la adopción de un perrito, su cucha, #subtrenmetrocleta y ahora cartas para Brancatelli y algún otro kirchnerista. Vamos al punto: Scioli necesita activar el corazón del votante y no tanto su cerebro. A menos que consideremos que en cuatro semanas podemos dar un debate técnico y que éste sea más efectivo que buscar un lazo emocional, claro. Scioli parece haber entendido eso al trocar el Scioli para la Victoria por #AhoraDaniel.
Vamos a los votos, ¿adónde están? ¿En el 4% de Stolbizer, en el 3% del FIT, en el 2% de Rodríguez Saá o en el 20% de Massa que incluye parte del 6% de De la Sota? Algunos creen que se perdieron muchos votos K puros. Microclima militante; como los que no entienden los cortes de boleta. Hablarle al convencido es desperdiciar tiempo precioso. Si todo el esfuerzo no está puesto en conseguir más votos afuera del universo K, estamos jugando a favor de Macri, así el que hable se llame Máximo Kirchner. ¿Y cómo le hablamos al de afuera? ¿Asumimos el discurso de Massa? ¿Sumamos garrochazos massistas? Los acuerdos cupulares puede servir para el impacto mediático, para generar clima, pero no mueven efectivamente el voto. Para eso hay trabajar, desde abajo y también arriba.
Pero entonces, ¿qué hacemos? Cada uno tendrá, con seguridad, una receta. Somos 40 millones de técnicos, ¿no? —ANDATE, MARTINO—. La mía incluiría a Scioli trascendiendo las fronteras de los actos partidarios para ir a besar chicos en los barrios, charlar con la vecina (¡uy, entró esa palabrita en el blog!), escuchar al tachero en algún viaje y a los pasajeros en algún tren o colectivo (todo televisado, por supuesto). Contacto humano, que lo otro, lo partidario, ya está. Y si no, con el cuco Macri debería bastar. Macri, el cuco. Como propuso @aldojarma, y como bien elaboró Pagni, los ballotages fueron pensados para eliminar al que más temor causa. Menem en 2003. Le Pen vs. Chirac en Francia. Ergo, hay que revelar a Macri. Mostrar su gestión elitista e ineficiente con las cuentas públicas porteñas. Si Scioli ya mostró su gabinete, obligar a Macri. Y que ellos den el debate técnico. Que Peirano y Batakis pidan debate contra los candidatos de Cambiemos. Rabolini y Awada en la mesa de Mirtha. El voto antiMacri existe, tanto en CABA como en el voto de UNA. Hay que estimularlo y mucho.
La otra es conseguir el garrochazo de Durán Barba. Y me parece más difícil. Recordemos entonces las palabras de don Arturo: “nos metieron flor de pij... ¡Ah, no, nada puede hacerse sin alegría! Eso, eso".
Me encantó lo de un debate Batakis-Melconián. Si insiste Michetti con Zannini, que sea a condición de un Batakis-Melconián.
ResponderBorrarAmigo Ricardo: Usted siempre se anticipa a mis pensamientos. Salvo por lo del “ragby” vamos pareciendo almas gemelas, hasta gallinas, vea. Y gustadores de los bitels.
ResponderBorrarHay que ir a buscar los votos massitas. Y ojo que no es tan así que ya está todo perdido. Acabo de hablar con dos compañeros de trabajo que votaron a Massa y están aterrorizados por que gane Macri.
Tenemos una ventaja: El proyecto económico-social del massismo es mucho más cercano al del FPV que al de MM, con el que no hay cosas en común.
Ese es un punto a favor que hay que explotar. De hecho la mayor parte de los dirigentes massistas que no volvieron están más cerca de nosotros, salvo el lilito Pérez, que es una especie de “rara avis” en ese escenario.
Ergo, hay que buscar el voto enfocados en que el voto massista es un voto antiK, medio derechoso, pero que no quiere volver a los 90 y en general no es muy afín a Macri. Habrá que utilizar un discurso que seduzca a ese electorado, por encima de los arreglos de cúpulas que no suelen ser efectivos. Quitarle esa prevención, ocultar lo que irrita, no joder por 30 días con la cadena nacional, utilizar a la campora para que recupere votos desgarrados, pero que deje la mística guardada por 30 días y sea realista y demande lo posible.
Hay que recuperar esa gente que está enojada por las formas y que seguramente voto a CFK en 2011, pero que ahora retaceó el voto porque no se la pudo convencer. Prometerle el fin del cepo, pero con seriedad y no un salto al vacío y otras consignas parecidas. Hasta puede prometer el 82% que resultaría más creíble que si lo promete Patricia Bull.., perdón Mauricio.
Scioli debe mostrarse como dueño del espacio, déficit que no tienen los otros dos ladris. Y, por qué no, usar el efecto miedo al cambio. Ese miedo que me transmitieron esos dos compañeros de trabajo que no son K, ni siquiera peronistas, y que quieren cambio por no tanto.
Y levantar el ánimo. Y dejarlos hablar a ellos, que saturen, que cansen, que metan la pata. Que Sanz jure que no van a ser la Alianza, que vayan mostrando el gabinete, que tengan que seguir ocultando a Melco (que no creo que sea el ministro. Va al banco, para entrar en el segundo tiempo). Hay que jugar con las incertidumbres de un cambio abrupto. De todo lo que pueden perder.
Yo todavía, me resisto a creer que Macri pueda ser votado por la mayoría de los argentinos. Prefiero creer que lo del domingo fue un llamado de atención.
PD: Cuando terminé de escribir esto leo lo de Fernando (¡que parecido a Godard!). Ya lo dije más arriba. No creo que MM se exponga a presentar a Melco como su ministro. Va a buscar un fusible para que haga el trabajo sucio (devalueta incluida) y después traer a Melco como el salvador de la patria. Es de manual.
Melco es piantavotos y eso lo sabe bien el ecuatoriano.
Ricardo, Groucho, nunca más de acuerdo.
ResponderBorrarEl voto massista tiene fuerte raíz antikirchnerista; hay que guardar a Cristina y la épica de lo hecho (paremos con el "no fue magia" por un rato), a esta altura son piantavotos. Dejarlo a Scioli volcarse un poquín hacia la derecha -ganas no le faltaban- y prometer gobernabilidad y correciones. Los votos que ya tiene el FPV son cautivos, no creo que con esa táctica se fuguen ciertas almas de cristal (es más: calculo que algún puntito de la izquierda rascamos, supongo que no son todos internacionalistas; de los margaritos espero menos -son gorilas con maquillaje progre a fuerza de psicoanálisis, vuelcan hacia Macri-).
No sé si después de los acuerdos y negociaciones que haya que hacer, va a quedar algo del proyecto FPV original. De lo que estoy seguro es que, en este escenario, somos el mal menor. Habrá que convencer al 50+1 de eso.
Abrazo!
1.- Las broncas y diferencias que motivaron la división del peronismo en el 2013 deben ser superadas.- Ningún peronista puede votar a la Unión Democrática que hoy representa Macri.- Massa, Alberto Fernández, Lavagna, Juanjo Alvarez, Redrado y casi todos los intendentes del P.R. formaron parte del Gobierno K, incluso en cargos de fundamental importancia.- El antiperonismo ganó las elecciones en el 1999 con la Alianza de De la Rúa porque un desprendimiento del peronismo, el Frepaso, se alió con la UCR.- Los antiperonistas de Macri, Durán Barba, Carrió y Sanz, pueden llegar a ganar el 22/11 si el peronismo llega nuevamente dividido.-
ResponderBorrar2.- El PRO en el gobierno implicará la derrota del interior "federal" frente a los porteños "unitarios".- Que el actual intendente de la C.A.B.A, -Macri- sea elegido Presidente de la Nación y la viceintendenta -Vidal- Gobernadora de la Pcia. de Bs. As. generará una concentración de poder porteño que los del interior no deben permitir.- El porteño es soberbio y piensa que sabe todo, pero ni siquiera conoce los problemas de los del Interior.-
3.- Scioli tiene que explicarle al pueblo que, aunque lleva a Néstor y Cristina en su corazón y está orgulloso de haberlos acompañado hasta aquí, si resulta elegido presidente de los argentinos, no se convertirá ni en Néstor ni en Cristina, ni intentará reemplazarlos o suplantarlos.- Actuará plenamente como Presidente de acuerdo a lo que su propia conciencia le indique.-
4.- Hay que dejar bien en claro que ni Macri ni el PRO son "el cambio" que invocan.- En realidad obstruyen o retardan "el cambio" para nuestro país e incluso reflejan un retroceso a lo ocurrido en la década de los 90, cuando el neoliberalismo desembocó en el 2001 en la más grave crisis económica sufrida por nuestro país.- Lo único claro y concreto en el discurso de Macri es su antiperonismo.- Hay que recordar como le fue a la Alianza de 1999, un rejunte de "antis" al gobierno anterior, que no tenían la menor idea de lo que había que hacer cuando lograron ganarle al peronismo las elecciones.-
Saludos
Eso es muchachos, yo propondría que le digan a Cristina que se vaya ya, que los está estorbando para lograr el gran triunfo. Que Néstor, qué Néstor, así el que no dejó las convicciones en la puerta de la casa rosado, lo dijo porque los tenía a todos Uds. como consejeros y uds. los ayudaron a conducir el país 4 años, y el nunca lo reconoció y puso a esa soberbia y estúpida mujer que estuvo 8 años destruyendo el gran partido peronista, amen de hambrar al pueblo y hacer todo tipo de cambios que no nos llevaron a nada, si no a que ahora que sí tenemos un gran candidato tenemos la posibilidad de perder. Hagamos ya una marcha, no olvidemos las cacerolas, son muy importantes, para hacer ruido, fuera Cristina, es la que pudrió este fantástico partido justicialista en el que todos, no todas, siempre nos llevamos bien.
ResponderBorrarTenemos un problema. El mayor caudal de votos de Massa que reside en Provincia de Buenos Aires se fue en el 2013 más por la paupérrima gestión de Scioli que por CFK.
ResponderBorrarEn Mar del Plata por ejemplo putean más a Scioli, Pulti y al dueño virtual de la ciudad Florencio Aldrey Iglesias ...
No sé , me parece que estamos en el horno, porque nuestro candidato es un collar de melones ...
Ojalá que Macri los asuste mucho...Pero mucho, eh.. Saludos.- Pablo, el Bostero.-
¡¡¡Lo felicito don Ricardo!!!
ResponderBorrarYo además de darle mi poroto pa' presidente de los blos' pero de de habla hispana mira' vo', propongo una moción para nombrarlo asesor de campaña de mancuso: gurú en jefe...
Con un posteo ya ligamos un voto de una peronista de perón o algo así ja ja....
Saludos
Tras el post y los comentarios, poco puedo aportar, muy poco, porque lo que podía decir ya lo dijeron Ricardo y algunos comentaristas y, encima, encontré un montón de cosas en las que no había pensado,jeje.
ResponderBorrara) El 25, Scioli ganó por dos puntos. No perderlo de vista. Repetirlo, repetirlo. Scioli no perdió: ganó. No estamos peleando para dar vuelta los resultados del domingo pasado sino para que esos resultados se repitan.
(Te cambia el bocho y le cambia el bocho a aquel con quien hablás si partís de que Scioli ganó.)
b) «Pero entonces, ¿qué hacemos? Cada uno tendrá, con seguridad, una receta. Somos 40 millones de técnicos, ¿no? —ANDATE, MARTINO—.»
Exacto.
En lo personal, cada defensor del FPV puede ser un técnico más y aplicar su receta en su entorno personal. Cientos de miles de técnicas distintas, no importa, cada quien sabe mejor que nadie qué conviene hacer en su entorno.
En lo general, una pregunta, muchach@os: ¿ustedes saben si los que diseñan la campaña de Scioli se toman unos minutos para arrimarse a leer la blogosfera K? Por acá hay ideas mucho mejores que más de una táctica diseñada por “los expertos”.
c) En cuanto a:
«La mía incluiría a Scioli trascendiendo las fronteras de los actos partidarios para ir a besar chicos en los barrios, charlar con la vecina (¡uy, entró esa palabrita en el blog!), escuchar al tachero en algún viaje y a los pasajeros en algún tren o colectivo (todo televisado, por supuesto). Contacto humano, que lo otro, lo partidario, ya está».
La escuché a Karina Rebolini en una entrevista (primera y única vez que la escuché) y ahí me di cuenta por qué Scioli la envió por todo el país: transmite “contacto humano” y es buena, muy buena en eso.
d) Por supuesto, nada de derrotismo. Pasaron 72 hs, el chubasco nos hizo sopa, pero ya está, hay que ganar el 22 o caer intentándolo. En otro blog (no recuerdo cual) leí un comentario que me gustó mucho: “que cada uno de nosotros asegure un voto más para Scioli”. Uno, dos, tres votos, no sé, pero esa idea, bien concreta, es una idea que nos obliga a todos a hacer un poquito. Solo un poquito. Como es poquito, es posible.
e) Hoy escuché, en el informativo, a Macri hablando en el acto de festejo de x años de creación de la Metropolitana. Copio de Clarín (aunque escucharlo es mucho más terrorífico):
"Yo siento que la Metropolitana expresa en gran parte que se puede construir una organización humana con elemento central que tenemos que recuperar entre todos los servidores públicos de la Argentina, que es la mística de sentirse responsable y orgullosos de la tarea que hacen", señaló.
Pegar al lado un par de imágenes de la represión en el Borda (una de ellas, sin dudas, la del tipo disfrazado de Rambo, apuntando a través de la mirilla de su rifle o de lo que sea, apuntando a la altura de sus ojos, para darle en el cuerpo a enfermos y enfermeros).
Sí, estas cosas son las que también hay que hacer: desenmascararlo.
f) Para construir abstractos es conveniente, a veces, ejemplificar con lo concreto. Los teóricos tienen su rol pero uno, de a pie, quizás lo que necesita es una buena lista de ejemplos prácticos, a aplicar según corresponda. Puede ser que el obrero de la fábrica de tuercas con el que hablás desee discutir sobre variables macroeconómicas, pero si no quiere hacerlo, quedará el ejemplo práctico: la economía macrista llevará a que sea más barato comprar tuercas importadas de China, en unos meses tu fábrica tendrá que cerrar y te quedarás sin trabajo. El problema es que también resultará más barato comprar clavos de China, bulones, martillos y destornilladores. En un año habrá tantos desempleados que no podrás conseguir laburo.
(Yo necesito buenos ejemplos prácticos para los que creen que por culpa de este gobierno el campo está peor que nunca y que nada será bueno hasta que se eliminen todas las retenciones y todos los impuestos al campo…).
Abrazo,
Esther
Norma, no se enoje. Ojalá las circunstancias fuesen otras, pero son las que son. ¿Usted vio la campaña de Massa? ¿Piensa que a ese electorado lo ganamos con más cristinismo? Mire que los resultados del domingo pasado parecen mostrar una sociedad un poco cansadita del kirchnerismo... Si fueran elecciones regulares, uno hubiese mandado a la mayoría opositora al carajo, por "votar mal". Pero estamos ante un balotaje, y nada menos que contra un monstruo. Hay que masticar la bronca y ver cómo hacemos para zafar de Macri.
ResponderBorrarCompañerxs, sabemos que hay un voto antimacrista. En la capital lo vivimos. Lousto, si Lousto, casi le gana a Larreta. Hace unos meses casi la mitad de la capital voto en contra del PRO. Esta bien que no es lo mismo Larreta que Macri, pero me parece que ahi tenemos un 25% para crecer, poroto mas poroto menos. Y supongo que asi en todo el pais.
ResponderBorrarSaludos
Si me preguntan esto se podria revertir con un acuerdo visible con Lavagna... traerlo para las filas del Sciolismo y por qué no proponerle Economía o algo así... para mi.
ResponderBorrarUn post demasiado voluntarista para mi propio gusto, pero los aportes en los comentarios quizás lo justifican.
ResponderBorrarGracias a todos.