lunes, 27 de octubre de 2014

Fiesta de fin del populismo: se suspende por lluvia

Uruguay es un caso raro y probablemente Mujica haya sido el menos “anti argentino" de los últimos Presidentes orientales (recordamos a Batlle). Retornará Tabaré y y es probable que hable con Kerry para solicitar la ayuda de EE.UU. en una muy posible (!) guerra contra nuestro país. No muy latinoamericano/populista/de izquierda, dirán ustedes, pero si gana Lacalle tenemos la obligación moral de adoptar la doctrina Bush y declarar un ataque preventivo contra Punta del Este. El Gral. Sabbatella ya está preparando a las tropas, por si acaso.

Pero lo verdaderamente importante era que ayer ganara Rive... Dilma, Dilma en Bras... ¡y River también, qué carajo!, pero el triunfo del PT en Brasil tiene un significado más profundo para la región y, particularmente, nuestro país. Puestos de trabajo en automotrices, comercio exterior, balanza comercial y apoyo político a organismos políticos sudamericanos podrían haber sido las primeras víctimas. El Mercosur, que nadie niega necesita de un impulso (del que carece en épocas de vacas flacas), podría haber sido su víctima última. En definitiva, nada quita que Dilma pueda realizar correcciones al rumbo actual del anterior entramado —demanda fundamental del complejo industrial paulista—, pero no significa a priori un cambio abrupto en la ecuación geopolítica sudamericana como el triunfo de Aécio Neves podría suponer.

Un par de líneas cortas: Brasil dividido en dos, prácticamente. Sur vs. Norte. O ricos vs. pobres. O capital privado vs. Estado. Son simplificaciones, claro, corporizadas en la campaña de la segunda vuelta y certificada ayer en las urnas. El discurso de la reelecta Presidenta llamó a la unidad y al diálogo —muy sciolista, Verbitsky, hacé algo—, y nada hace suponer que su segundo mandato pueda ser menos complicado que su primero. En 4 años, quizás, el PT enfrente una situación similar a la que en 2015 vivirá el kirchnerismo aquí, aún considerando a Lula. Es que al contrario de nuestro país, a 4 años del fallecimiento de un patriota, en Brasil la muerte no estuvo segura de vencer.

Pero además del factor vital, ¿cuánto influyó el discurso posterior a la primera vuelta de Dilma?, cuando aceptó comprender el mensaje de las urnas y la necesidad de corregir algunas cuestiones caras al imaginario de la clase media —clase C en Brasil—, terreno de disputa en en aquel primer turno. Tuvieron otras particularidades estas elecciones, y el factor Marina Silva no puede ser soslayado. Antes de la muerte de Campos, todo parecía encaminado hacia un triunfo más amplio de Dilma en primera vuelta que restara dramatismo al ballotage. Luego el huracán Marina, que parecía navegar con vientos sólidos pero resultaron sólo vientos encuestológicos. Los grupos de poder en Brasil tenían muy claro que era más fácil que los votos de Neves tributaran a Silva que a la inversa, (uno de los factores que consideramos para trazar paralelismos entre Marina y Sergio Massa en nuestro país). Los números y el mapa de Brasil indican que la disputa se desarrolló entre continuidad y cambio antes que sobre la tercera vía o la ancha avenida del medio.

Las más reciente encuesta de Poliarquía parece presentar un escenario similar en nuestro país para el próximo año. Pero para eso falta. Por lo pronto, el populismo latinoamericano se resiste a cumplir los pronósticos y morir. Enhorabuena.

11 pusieron huevos y comentaron:

rib dijo...

yo que creía que el partido blanco
era el "populismo" oriental

http://es.wikipedia.org/wiki/Partido_Nacional_(Uruguay)
http://es.wikipedia.org/wiki/Manuel_Oribe

en fin

profquesada dijo...

Así es los que se tienen que poner nervioshos son los otros, nosotros a relajarse y seguir en la lucha que es cruel y es mucha.

Mirados en ese espejo, algunos propios comienzan a sentirse incómodos porque aún no tenemos candidato. Uno. Hay muchos, demasiados y no todos son compatibles. Creo que a esta altura es una ventaja y, además, una necesidad, Cristina es la mejor ubicada de entre nosotros y debe mantenerse en el centro de la escena aunque no pueda ser candidata.

¿Y la oposición?, tampoco lo tiene. La corporación mafioso mediática es posible que sí, por lo menos in péctore como decía el riojano, y es posible que ese sea Macri (quién lo diría?)pero el camino para sumar a su alrededor es largo y lleno de dificultades y la suma, en caso de lograrse, tampoco les garantiza el triunfo en primera vuelta persistiendo tamaño apoyo a Cristina, podrán acortar la diferencia pero su destino puede ser el mismo que el de Aecio o peor si se mira el hipotético efecto de la primera vuelta en la composición de ambas cámaras.

Y Ríver! Nos ha devuelto las ilusiones y la confianza. Ganar, dando vuelta un partido bien chivo no es poca cosa. Si con jugar bonito no alcanza hay que echarle guevos.

Algo de eso le pasó también a Dilma. Ambos tenemos un buen DT.

Charlie Boyle dijo...

Coincido con RIB, no considero al FA populista, el caso de Dilma es distinto aunque no es un populismo al estilo doméstico.
No hay que confundir populismo con practicar inclusión social económica.
Para saber si un gobierno es populista hay que evaluar las posibilidades de que sus líderes vuelvan. Si lo logran, no son populistas. Los nuestros nunca tienen retorno.

Erkekjetter Silenoz dijo...

Ja ja...

Y si el "populismo" es sólo nuestro, tetra con chori... y asi debe ser... como el dulce de leche o la birome.

Y que los eunucos refunfuñen intelectualmente con la encyclopaedia mientras se particionan (hasta llegar al cluster) al mejor postor.

Por otro lado ver la campaña:
Revalorizar lo ganado + antagonismo entre "buenos y malos"

Reflotar la "memoría histórica" para que fluya el "conservadorismo" frente a la gente linda que promete volver al "primer mundo" y "ser lo que nunca se será"

Saludos

Ricardo dijo...

Luego vuelvo con alguna respuesta a los atendibles planteos. Sólo quería dejar este link que grafica el ricos vs. pobres del post:

https://twitter.com/Marcnqnarg/status/526825955206397952?s=16

Salud.

Ricardo dijo...

Volví. Entiendo lo que dicen respecto a populismo, y si nos ponemos estrictos, el kirchnerismo tampoco sería uno, y el peronismo vemos. Usamos el término como un atajo y un modo de esquematizar lo que no es exactamente pro mercado.
Acá hay otro tuit muy bonito que sirve como ejemplo:

https://twitter.com/TheEconomist/status/526810635670409217?s=16

Chau. Felicidades (!).

rib dijo...

el pt + pmdb pudo ser la alianza postmenemisa
pudo ser cristina, cobos y vos

http://pmdb.org.br/entrevista/o-constitucionalista-e-poeta-entrevista-de-michel-temer-para-revista-forum-juridico/

lo que no es ... no es

Capitán Medibacha dijo...

Comentario un poco fuera de foco: En medio de las elecciones en Brasil ¿No les llama la atención que en televisión no tenemos -ni por cable- un solo canal Brasilero? Tenemos la BBC, la CNN, TV española,gallega, catalana, francesa,mejicana, chilena, Al Jazeera, la Deutsche welle, Fox news, inclusive Telesur y ahora parece que también la rusa "Russia Today", (aunque hasta ahora yo nunca la pude ver).- Pero no hay un solo canal brasilero.- Desde ya tampoco uruguayo, ni paraguayo.- ¡Qué flojo el Mercosur en este aspecto! Saludos

Ricardo dijo...

Acá en Tucumán, el cable con mayor cantidad de usuarios tiene O Globo...

Ah, y hoy el compañero (?) Pagni enrola al gobierno del PT en los sucios populismos de izquierda (!) latinoamericanos. A ver, díganle algo al pelado (?).

Particulares 30 dijo...

Pensar que el festejó del triunfo de Dilma y de Tabaré es solamente patrimonio del mundo K, es el creer que nuestro Campo Nacional se cocina únicamente en el FPV.

Si bien el PT como el FA representan intereses comunes a los nuestros sus construcciones son distintas, mientras ellos generaron un heredero natural no cuestionado, Scioli no es aceptado como el gran elector del FPV. La centralidad política que dio un gran resultado, hoy parece no tener la solución. Si bien Scioli sabe perfectamente que sin Cristina no puede, también sabe que con Cristina solamente no llega. A su vez si la situación general del país en el plano económico no se modifica, tampoco ni puede ni llega, por eso se recuesta en Cristina esperando que responsablemente solucione esas cuestiones.

Si bien el frente interno no depende de él, su problema mayor es como sumar a esa masa de votantes que aún no está definida que fue expulsada o no incluida en el modelo, que se pregunta cuál será su actitud si lo rodean cuando se conformen las listas. Llegada esa circunstancia de acorralamiento su único salto posible sería “Yo no me voy, ustedes con esa actitud me están expulsando”. Si eso sucediera se replicaría en nuestro país el fenómeno Marina Silva, porque le daría la posibilidad de aglutinar detrás de él a gran parte del Campo Nacional y obviamente a todo el peronismo porque abriría el juego, mientras el gran negocio del mundo k sigue siendo que gane Macri. Difícil la cosa.

SuperLumpenProletariat dijo...

El peronismo es puro populismo. Es «Agitación Reaccionaria» como me gusta decir a mi para emparentarlo a sus antecedentes europeos (y después el que -"vive mirando a Europa es uno, el Anti-Patria-").

NO creo que Cipriano Reyes me desautorizara ... ¡y eso que estuvo en la pomada!