¿Qué puede decirse del partido que nos diera el campeonato, frente al Quilmes de Caruso Lombardi, que no haya sido dicho ya por el Conejo Tarantini durante la transmisión? Todo, por supuesto. ¿Quién fue el genio que contrató al monosilábico campeón del ‘78? Paredón, sur y después. Cruel aquel que nos obliga a recordar con nostalgia a Marcelo Araujo. Mucho después, mucho sur y sobre todo mucho paredón. Pocas cosas podemos aprehender con seguridad dicen algunos amantes de la sabiduría, pero si este River-Quilmes entregó una certeza, esta es que Caruso Lombardi debe devolver las valijas a Estudiantes y Boca. Y conseguir una orden de restricción para cualquier notero, guardarse en la tranquilidad de su hogar, afeitarse la barba para no ser reconocido y abandonar cualquier pretensión de estrellato. Su momento fue. Seguro como estaba de convertirse en el reemplazante de Martino al frente del Barcelona (si conseguía amargarle el grito de campeón a River), ordenó rodear a Carbonero, atajar a Lanzini y obstruir la progresión de Vangioni. Todas medidas razonables, si empatar con el equipo de Ramón era el negocio. Pero, como suele ocurrir en estos partidos, apareció un tapado, ese jugador inesperado que quiebra lo previsto y se convierte en providencial. Como Ricardo Vaselina Rojas frente a Boca, como Ramiro Funes Mori frente a idéntico rival, como Ariel Garcé en el departamento de Pradón y en la lista de Maradona, apareció aquel de quien nadie sospechaba que pudiera nunca vestirse de héroe. Como aquel señor mayor y dislipémico, que en los picados da órdenes desde el fondo, a quien nadie marca por cortesía y ahorro de energías; olvidado, cabizbajo y triste recorría las canchas, volando demasiado bajo para el radar del gran Ricardo Caruso Lombardi. Y de repente se descubrió nuevamente Cavegol el viejo y oxidado Fernando Cavenaghi –Cavenalghi® para este blog y portal twittero–, para abrir temprano el resultado. Luego vino el Lobo Ledesma, habitual blanco de cuanta crítica mordaz pueda inteligir este brutal comentarista, para dar por tierra con cierta parte del calor tierno que el partido sentenciado despertaba en nuestro riverplatense corazón. No hay caso: la alegría nunca puede ser completa. ¿No podía clavar ese zapatazo Vangioni? ¿Meter un gol olímpico Lanzini? ¿Cabecear un córner Barovero faltando 30 segundos? No. Tenían que ser Cavenaghi, Ledesma y Ramón Díaz darse el gusto de mandar a los amigos de Emiliano, Menseguez y Osmar Ferreyra, a disfrutar lo conseguido por Maidana, Rojas y Teo Gutiérrez.
Si debemos realizar un análisis global del comportamiento del campeón de la Copa Raúl Alfonsín –y no debemos, pero ya que estamos–, hemos de señalar los escasos puntos obtenidos como visitantes (10/37), el rumbo errático que nos llevó desde liderar el certamen en algunas –pocas– fechas hasta dar casi por perdido el campeonato en algún otro momento. También que Ramón Díaz le recortó las chances mundialistas al tucumano Kranevitter, al relegarlo al banco de suplentes cuando pedía a gritos el lugar ocupado por Ledesma. Por el contrario, los puntos altos del equipo fueron Carbonero (resistido por la paladarnegrera platea San Martín, demostrando fehacientemente cuánto sabe de fútbol), Ariel Rojas (acierto de Ramón Díaz y fetiche para gritar “¡Ariel, Ariel!”), y los desempeños puntuales de algunos futbolistas: Maidana, Ramiro Funes Mori, los arqueros Barovero y Chichizola y algo, poco, del colombiano Gutiérrez. Este último partido de Lanzini también, jugado a nivel de hermano de Messi. Pero por no estar convocado a Brasil, hermano de Carlitos Tévez nomás.
Y mientras los famosos despiden a Boca en Twitter, mientras los hinchas de Boca celebran el campeonato imaginario de puntos acumulados como su propia Mesa de Necochea, mientras Cavenaghi le hace pito catalán a Cormillot y le manda un fuck you a Jorge Hané, este bloguero quiere compartir el triunfo con sus virtuales amigos, y finalizar dedicándole el campeonato a los cuatro héroes que tuvo River en esta Copa Raúl Alfonsín:
1. Ramiro Funes Mori, en la tarde en que la Bombonera sufrió de silencioatrozitis.
2. Leandro Chichizola en la fecha 17, al atajarle un penal a Sebastián Saja en tiempo de descuento frente a Racing (el gol de Pipino Cuevas de este campeonato #35).
3. Pablo Lunati, quien sólo debió contribuir con un penal frente a Arsenal pero aún así supo hacerse de su lugar en el corazón del hincha de River. Y,
4. Este humilde bloguero, quien –como ya dijéramos– con sus continuos e incuestionables pedidos de renuncia asustó de muerte a Ramón Díaz y a su ayudante e hijo Emiliano, quien se habría comprometido a no tomar prestada sin devolución ni aviso ninguna netbook en caso de despido por parte del Club. Lo felicitamos.
Los hinchas agradecidos.
Y a pesar de todo, Ramón Díaz, ya sabe: si es hombre, re-nun-cie. Ahora. Con toda la gloria.
El Chapulín Cardetti o Muerte. Venceremos.
El Chapulín Cardetti o Muerte. Venceremos.
22 pusieron huevos y comentaron:
Muy bueno el programa
Hace seis años se dio la posibilidad de que Ledesma viniera a Independiente, pero fue desechada porque "estaba de vuelta".
Así nos va.
Felicitaciones al campeón.
Ya lo dijo Ramón Diaz en conferencia de prensa :
-Queremos agradecer este título a Ricardo Blogger, ya que sus críticas , comentarios y pedidos de renunciua nos han llevado a enderezar el rumbo en momentos de crisis. Sin él, este título nunca se podría haber alcanzado.
Rodrigo: ¿ves qué simple le hubiera resultado a Ramón ponernos de su lado? Pero no, se empecinó en ningunearnos (!) hasta que no lo pudo sostener (!!) y cambió.
Ja.
Tu post no amerita análisis alguno de mi parte, algo que tampoco tiene relevancia. Somos campeones y como te dije ayer, enorme abrazo.
Soy Felíz
En la vida hay situaciones inesperadas, pero que se agradecen, para alguien de corazoncito boquense es desagradable andar mintiendo felicitaciones en dias tan grises.
O sea, es buenísimo hacerle llegar hoy mi más sentido pésame y el apoyo de siempre en su cruzada anti 2do. riojano más (tristemente) famoso.
Felices 35!!!. Me gustó mucho esa verdad de perogrullo afirmada por el filósofo hipercrítico de Ramón que acompañé y acompaño y que conviene no olvidar nunca: "La vida se vive en el presente". y recuerdo otra que viene al caso: A caballo regalado no se le cuentan los dientes. Ya vendrán, quizás, otros triunfos y otras copas más "merecidas" que esta. En el contexto del degradado fútbol local lo de este Ríver renacido no es la excepción, es la regla.
Un gallináceo abrazo con los vestigios de alas, chamigo.
Según las claras explicaciones enunciadas por Ram, yo tampoco lo voy a felicitar por el campeonato y sí a favor de la cruzada antiriojana.
Y ojo, que se acabaron los campeonatos cortos (por ahora); se supone que el próximo campeón va a tener que demostrar un poquito más de regularidad que una racha de 4 ó 5 partidos ganados "al hilo".
El kirchnerismo se alveariza y este blog se ramoniza. El fin del mundo se acerca!
Sos un tipo coherente.tanto para tu vision del futbol como de la politica
"¿Vieron que no era tan fácil, eh? Chau muchachos"
Ramón dixit
Ramón demostró que puede sacar campeón hasta a un rejuntado de mulitas.
¡Gloria y loor, al gran Ramón!
Este canalla, agradecido a Miguelito que nos dió dos alegrías este año, no puede dejar de reconocer que Ramón se parece a mi bobe, que hacía sopa de pescado...sin pescado.
Un grosso, de verdad.
Todavía habrá tiempo para Ramón a la selección en 2018 ?
Salute, Ricardo, y que lo disfrute. Para eso uno se hace amigos de Boca o de la lepra. ¿Sabe que amargura que es festejar un campeonato sin nadie querido a quién cargar? Me pasó en el '80, vea, y no se lo deseo a nadie.
Abrazo de campión, Ikal, amigo ramonista, je.
ram: ¿vio? Las ventajas de escribir un post reivindicativo de Ramón que es también una puteada (?).
Coincido de principio a final, profe! Gran abrazo gayina!
Carlos: sí, ya había escrito algo contra los campeonatos largos hace algunos años. Acá:
http://loshuevosylasideas.blogspot.com.ar/2010/08/no-los-campeonatos-largos.html
Los argumentos son todavía válidos.
Pobre Conejo y su pasado de cara de liebre muerta. Vio la parte blanca de la camiseta de River, vio colombianos, y se quedó duro (?).
Todavía no reaccioné. Ver a River jugando unos minutos como siempre jugó River fue muy fuerte, no estaba acostumbrado. Fue como ver a la primera novia veinte años después y notar que está bárbara.
Saludos
Aldo: solo falta que los fanáticos (!) de Lilita Carrió voten por el peronismo y cerramos todo, ja.
Unknown: 'chas gracias (?)
Udi: bueh, tampoco es un rejuntado de mulitas. Mercardo es un jugador de Selección (!), ja. Ahora, fuera de joda, River tiene un buen plantel, comparado a otros de acá, claro, no al del Bayern. Pero sí debemos reconocer que este mismo equipo jugaba bastante peor el campeonato pasado.
Abrazos a tuitos.
Cine: Tarantini es la coppolización del FpT (!).
Ahora, muy cierto: siempre que se soltó, luego de algún gol, River tuvo pasajes de juego asociado como hacía tiempo no veíamos. Carbonero fue un abanderado de eso. Gran partido de Lanzini.
Abrazo!
dos palabras para Ramón,desechó a POnzio ,no estuve de acuerdo,ayer debieron entrar un rato Chichi y el Keko..entraron los amigos del nene..y Bueno..seguiré cuestionando al riojano,pero hoy agradezco..Yo la noche del 26-06-2011 me tomé media botella de escocés y fumé tras 10 años..me encontraron dormido y lleno de lágrimas sobre la PC..el domingo 18 borré el dolor..
Qué comentario duro y sincero, Eduardo. Gracias.
Creo que lo de Ponzio, y los amigos de Emiliano, son los métodos del riojano para establecer que no hay más liderazgo que el suyo y el que él habilite. Parte de los métodos que no me gustan pero que son difíciles de criticar cuando se gana. Además Ponzio contribuyó, bajando su nivel.
Saludos.
"los hinchas de Boca celebran el campeonato imaginario de puntos acumulados" (?) Eh? Velez fue el mejor equipo de la temporada, tiene los mismos puntos que Boca y le gana por diferencia de gol.
Polo: esto fue escrito el domingo a la noche. Vélez jugó recién el lunes. Los hinchas de Boca festejaban ese campeonato el domingo...
No seas así Ricardo, a nosotros que casi no nos mueve un pelo los torneos de cabotaje, imaginate el de tabla acumulada.... Felicitaciones aunque estos torneos más que a un campeón consagra al que la última fecha sorprende en la primera posición... Si a nosotros , que fuimos una murga , nos encontró segundos.... pregunta, No son 36? Ah , no , pará..Saludos.- Pablo, el Bostero.-
Pa' mí son 36. Hicimos un gran torneo en la B. Capos del ascenso. Ja.
Abrazo, Pablo.
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