viernes, 30 de agosto de 2013

La #LeyDeMedios como símbolo de la disputa

No existe obligación de empezar por el principio, sí el derecho. El de libertad de expresión no está en absoluto en riesgo. Pero, en principio, hay que decir que provoca tristeza estar todavía debatiendo la Ley de Medios a cuatro años de su sanción. Estuvieron bien en la Audiencia los Supremos, pero no estuvo bien que desde 2009 estuvieran gambeteando una definición. En 2011, a modo de ejemplo, el espacio para un fallo salomónicamente injusto, a medio camino entre las posiciones absolutas del Gobierno y Clarín, hubiera sido mucho menor. Hoy... no estamos en 2011.

Entonces hay que decir que las declaraciones de Lorenzetti, en el sentido de equilibrar las posiciones históricamente pendulares en nuestro país, no tienen al Derecho como horizonte sino a la política como medio e instrumento. Si antes eso, equilibrar, era un sciolismo, hoy es massismo hecho y derecho. Como lo definimos antes: decretar el fin de la historia fukuyamista, para nuestro país, tomando como mojón el actual estado de cosas.

La línea, lamentablemente (y tomando en consideración que el kirchnerismo es un reformismo y no la toma del Palacio de Invierno), se traza en el kirchnerismo pre125, que fue lo que parió -la 125- la lucha contra las corporaciones, SRA, Clarín y, hace poco, la batalla perdida contra el Poder Judicial. Por no hablar de otras, varias, batallas perdidas en el camino, traducidas en las urnas ya que el contexto económico deja traslucir que al kirchnerismo, las corporaciones, ya no le temen como antes. El límite fronterizo para hacer aduana, migraciones y retornar al país normal, ese que prometía Kirchner en 2003 pero que, evidentemente, significa distintas cosas según quién lo imagine. Yo digo país normal y pienso en trabajo en blanco para todos; desde los sectores opositores al kirchnerismo dicen país normal y se refieren a un estado de situación en el que los privados recuperen la maniobrabilidad y los resortes del poder que el oficialismo recuperó para la política y el Estado.

En definitiva, la pelea, y esto lo saben todos, argumentos más (que ayer demostró tener el Gobierno), argumentos menos (los presentados por los abogados de Clarín), es una disputa de Poder. Ni siquiera es Mercado vs. Estado, porque Clarín reconoció que no quiere libre competencia (fundamental del capitalismo) sino que pretende asociar a la libertad de expresión con el tamaño de una empresa para ejercerla. Una ridiculez supina. ¿Yo, acaso, no puedo ejercer mi derecho a la libertad de expresión porque sólo tengo un blog y una cuenta en twitter? La pelea es más terrenal, más sucia, más real que el enunciado Corporaciones vs. Gobierno: es una corporación, periodística, financiera, que simboliza además a otras una corporación, contra este gobierno porque interviene en economía y no como a las empresas a las que les interesa el país les gustaría.

Para ponerlo en contexto histórico, el kirchnerismo nos sacó del infierno pero, una vez arribamos al purgatorio habitual (en lo que respecta a distribución de la renta, igualdad y derechos tolerables como graciosa concesión de los dueños permanentes al resto de la ciudadanía), le dijeron muchas gracias, muchachos, hasta aquí llegaron, ahora tomamos la posta nuevamente nosotros. La disputa por la Ley de SCA no es un capricho: traduce, en la superficie, ese conflicto.

15 pusieron huevos y comentaron:

Nando Bonatto dijo...

lo que se mostró tambien ayer, es la presentacion formal del Poder Judicial como ultrapoder donde por encima del comun de los mortales,ignora todo el debate legislativo previo, todos argumentos expuestos en las diversas causas judiciales y arma toda una puesta en escena donde juega el rol de
Sus Majestades ante los subditos y lo que es peor,poniendo en la misma linea al Estado que somos todos con un grupo comercial.EL rol de la corte es analizar si se violo algun derecho constitucional ,no cualquier otra funcion como ayer quedó demostrado donde indago de fuentes comerciales y viabilidades economicas
E

Erkekjetter Silenoz dijo...

Yo creo que el acto de formalizar estas presentaciones, que hizo la corte, son ridículas.

Ahora, si los supremos le conceden alguna al grupete, una vez más quedarán para el soberano ojete frente a las argumentaciones de las ONG que ¿desinteresadamente? respondieron a favor de Clorín.

Lástima que una gran parte de "laggente", me parece, no se enteró y/o vió lo que esconde esta desgraciada pantomima que, en el fondo, encierra lo que bien describís en el posteo.

Saludos

Anónimo dijo...

¿Todos problemas por luchar contra las corporaciones?. La fusión Cablevision- Multicanal (Clarín) fue una prebenda del gobierno que salió mal. La renovación de la Corte fue la primera gran reforma encarada por Néstor que salió mal. Los fallos de la corte norteamericana con los fondos buitres, es porque se fijaron esos tribunales para dirimir un conflicto y también nos salió mal. Scioli el ayer dudante y traidor se puso al hombro la campaña del FPV en la PBA, nos salió mal. Se eligió un buen candidato como Insaurralde pero lamentablemente es desconocido y nos salió mal. No hay re re y no sabemos cómo y con quién sigue el proyecto, nos muestra que algo hicimos mal. Más que victimizarnos deberíamos cortarnos las bolas.

Anónimo dijo...

SI NO LES GUSTA ESTE GOBIERNO ARMEN UN PARTIDO Y VOTEN...Nos habrá salido mal?

Capitán Medibacha dijo...

Traté de seguir con atención las audiencias en la Corte por el tema de la ley de medios.- Tengo que decir que, como abogado con ya 40 años de profesión, no recuerdo que hayamos tenido otra Corte Suprema mejor que ésta, al menos en estos 40 años.- Ahora bien, lo que hicieron ayer y anteayer borra gran parte de todo lo bueno que hicieron hasta aquí.- Creo que, sencillamente, han confundido su rol.- Especialmente en las preguntas que hicieron tanto a Clarín como al Estado, me pareció que se colocaban en un papel supra-legislativo que no les corresponde.- No se ciñeron a la cuestión en litigio: si la ley de medios es incompatible o contraria a alguna disposición constitucional vigente y en especial a la libertad de expresión.- Eso y nada más que eso es lo que la Corte debía analizar y resolver en este caso.- Más allá de lo que en definitiva resuelva el Tribunal -mucho me temo que se viene una sentencia a la medida de Clarín- lamentablemente se ve que estos Cortesanos han perdido el rumbo y la imparcialidad.- Los jueces no están para suplir a Diputados y Senadores en la redacción de las leyes, ni para cuestionar la conveniencia, oportunidad o razonabilidad de las mismas.- Si Lorenzetti quiere hacer leyes que se presente a elecciones para ir al Congreso de la Nación.- No me extraña en absoluto que Zaffaroni se haya retirado de la audiencia el día miércoles y ni siquiera se haya presentado el jueves, anunciando que renuncia en el 2014.- Lo interpreto como un rechazo personal a la violación institucional en que incurren sus restantes colegas del Alto Tribunal y de la que no quiere ser parte.- Un abrazo.-

Anónimo dijo...

El disciplinamiento y el sometimiento como el arma más efectiva para la construcción política.... ¿también está mal?

Ricardo dijo...

Nando, Capitán: sus comentarios van en el mismo sentido y debo decirles que coincido. Si bien me pareció que los Supremos estuvieron más duros con Clarín (o los abogados no estuvieron a la altura de quejan redondo por el Estado), por la información que circula, por los dichos de Lorenzetti y por esta actitud de colocarse por encima de la disputa entre los dos restantes poderes del Estado y un privado (cuando por la actitud de estos cuatro años bien pueden ser considerados parte también), me parece que se trata de una puesta en escena para fallar finalmente de manera salomónica e injusta.
Ayer recordaba en twitter que en el famoso juicio antimonopólico contra Microsoft, EE.UU. arregló con la empresa, pero le proporcionó una derrota simbólica a cambio.
Ah, también decía que esta es la mejor CSJ que supimos conseguir, pero pareciera que ni esta se salvará de velar por el derecho de las empresas a la no libre competencia...

Ricardo dijo...

Silenoz: es lógico que lagente, cuatro años después, esté podrida de escuchar siempre lo mismo para una pelea, además, que no le significa nada en la billetera a corto plazo.

Anónimo: la cuestión con Clarín, lo decimos en el post, es una política. En esos términos se insribía la fusión. La renovación de la Corte no salió mal. Es la mejor Corte que tuvimos hasta ahora, pero no termina de ser suficiente porque, qué va'cer, es una pelea perdida, pero democratizar al poder judicial es un objetivo deseable.
Y supongo que los otros anónimos también sos vos. Sí, el disciplinamiento está mal. Es preferible convencer.

Tilo, 72 años dijo...

No resulta sencillo lograr que quien está acostumbrado a mandar, suelte aunque más no sea un poquito, el mango de la sartén.
Si la decisión de la Corte no le es favorable, también los SUPREMOS se convertirán en "puesto menor", como acabo de leer en otro blog.

Lo más positivo de todo este enchastre tan dilatado y dificultoso, es que ha ayudado a poner en relieve DÓNDE RESIDE EL VERDADERO PODER. No lo tuvo ninguno de los gobiernos hasta 2003. Y tampoco el tuerto ni la yegua. Ahora bien, estos dos últimos son los únicos que hasta cierto punto consiguieron cambiar el ritmo del baile por primera vez en más de medio siglo y - especialmente - abrir conciencias y mentes para entender un poco más de qué se trata.
Por más que sigan jodiendo con el tretrabrick y el choripán, con el populismo y la "dictadura KKK", en los últimos años se ha reducido apreciablemente la dieta de vidrio molido de muchos argentinos.

Saludos

Anónimo dijo...

Me estoy convirtiendo en fans de este blog.

La 125: sí, el punto de inflexión. Otra sería nuestra historia si esa pelea se hubiera ganado. Lástima que tantos no llegaron (ni llegan) a verla como lo que fue en realidad: no únicamente una cuestión de retenciones, sino la pelea grande entre un Estado que es de todos y los poderes fácticos.

Las audiencias. Las seguí en parte. No tengo conocimientos de Derecho, pero aún así me quedó claro que la Corte trataba de cuestiones que no tenía por qué tratar, ni por la causa en sí misma ni por sus funciones (no es el poder legislativo). O sea, acuerdo en eso con comentaristas anteriores. Quedé asombrada del bajo nivel de los defensores del grupo Clarín. Quedé admirada del alto nivel de algunas exposiciones de los defensores del Estado; incluso me emocionaron algunos tramos. Creía que las preguntas del día jueves ya habían sido entregadas con anterioridad a las partes para que las estudiaran, pero no recuerdo dónde leí lo contrario, ¿cómo fue? ¿Ustedes lo saben con certeza? Porque si no estaban en manos de las partes desde antes, entonces lo de Graciana Peñafort es para sacarse el sombrero.
Sin ser abogada, me quedó en claro, también, las diferencias entre ambas posturas.

Retomo una frase de Ricardo en su entrada y hago la siguiente pregunta: ¿desde cuándo el derecho a la libre expresión es cuestión exclusiva del periodismo? Creía que era un derecho que teníamos todos. ¿Por qué se habla de "libertad de expresión" y no de "libertad de prensa" o la expresión que corresponda? No sé. Esto me hace pensar en una confusión fea.

Creía que Zaffaroni se fue el miércoles porque se iba de viaje, a alguna reunión o algo así. ¿No es así? ¿Renuncia?

No tengo claro el porqué de estas audiencias. Pero lo que más me llama la atención es la insistencia de la Corte para que fueran públicas y que fueran televisadas en vivo y directo por todos los canales que así lo quisieran. Incluso el miércoles Lorenzetti agradeció particularmente a los periodistas presentes. No sé, no tengo conocimientos reales, pero no me parece que esto sea habitual en la Corte, ¿no? Siempre tuve la imagen de un grupo de personas que está siempre encerrada en un cuarto, entre paredes. Que deseen tanta exposición pública, que insistan en ello… Me parece raro. Porque, además, implica que quede el archivo grabado en manos de todos los que hayan grabado las sesiones, las hubieran o no pasado en vivo y directo. Deja a la Corte para toda la posteridad, en un formato multimedia.
¿Puede haber una ligerísima esperanza de que lo hayan hecho para tener una excusa de peso si fallan en contra del grupo?

Y bueno, en todo caso habrá que recurrir a tribunales internacionales. Mientras tanto, aplicar en todo lo posible la Ley y tener resultados concretos que mostrar. No sé cómo se hacen estas cosas, eso sí.

Saludos.
Esther

Erkekjetter Silenoz dijo...

No creo Esther que se deba para tener una excusa frente al grupo.

A mi me da más por pensarlo como un acto sobreactuado o demagógico de ecuanimidad para desvirtuar, refutar los "ataques" -del gobierno- por su corporativismo.

A los que nos interesa y estamos mas metidos (tanto ofos como opos) me parece que la farsa es elocuente pero, como decía arriba, a la gran mayoría de la gente no percibe los intereses detrás.

Saludos

Norberto dijo...

Ante todo Esther, el término justo es libertad de acceso a la información, que es nuestro derecho, el de los periodistas es el de expresar sus ideas en libertad, o sea la libertad de expresión, pero eso está vinculado a que yo tenga acceso a toda la información, incluyendo la posición desde la cual el se expresa y cual es la libertad de expresión que le permite el medio por el cual lo hace.
Si la Corte falla a favor o en contra ya no tiene sentido, el proyecto del Grupo se logró, y la heroica bravata final es rebatida porque el Grupo formó un partido y parece que ganará la elección de octubre, en lo que yo denominaría una victoria pírrica, porque todo intento de regreso tropezará con los mismos que hoy lo apoyan a ojos cerrados, que abrirán de inmediatamente por su órgano más sensible.
Ahora que la línea de flotación la tienen muy expuesta y lo saben, ha sido notablemente expuesto por las veces que hablaron de la edición limitada de la convergencia tecnológica, por cuanto todo fallo que preserve su posición dominante en cable puede ser contrarrestado por la apertura de la provisión del servicio por parte de telefónicas y eléctricas bajo condiciones controladas de precio y grillas, esa es la desesperación por el control del Congreso, y de esta envestida que no logrará impedir que contemos con los mismos legisladores que hoy, a pesar de todo.
Nosotros somos Ella, abrazos.

Anónimo dijo...


Hola samigo. Algunas impresiones:
"la libertad de expresión no está en absoluto en riesgo". Mmmm dijo la nutria.
Lo que está en juego (y me temo que perdimos), es el derecho a la información. Información como derecho vs. información como mercancía.
Vio que según Jakobson la comunicación/información se produce porque hay un emisor, un receptor y un canal. Bueno... lo de 1 CANAL Clarín se lo tomó al pie de la letra, (que con sangre de la dictadura, entra)
"Clarín reconoció que no quiere libre competencia (fundamental del capitalismo)"
El capitalismo se define por las relaciones de producción, no por los intercambios. (discutible pero yo asumo esa postura)
¿De dónde sacó que la libre competencia es fundamental para el capitalismo?
¿De los textos de economía neoclásicos? Un cacho antes con Smith y La Riqueza de las naciones?
Que el Estado no intervenga y que el mercado se regula solo es fue y será discurso encubridor. El monopolio, oligopolio es inherente al capitalismo. ¿Conoce algún país sin monopolios verdaderos?
Sin el estado avalando, no hubiera habido los mercados de los noventa.
Clarín quiere capitalismo, o sea monopolio.
Su último párrafo impecable.
Abrazo

Anónimo dijo...

Gracias, Silenoz, Norberto.

Silenoz, sí, puede ser una sobreactuación, no sería inteligente como tal y menos con los resultados que se dieron (sobre todo el jueves), pero, poniéndose a pensar… Los políticos aprenden rápido los riesgos de la exposición pública (con notorias excepciones), pero es capaz que los jueces no, no están acostumbrados a exponerse y eso los lleva a sobreactuar y creer que es una buena herramienta para ellos.

Norberto, "libertad de acceso a la información", okey. Que es lo que vos decís, entendiendo "toda la información" como "información plural", ¿no es así? Aquí la información pasa a ser un bien público, no meramente una mercancía, como apunta elsudacarenegau. Pero la libertad de expresión sigue siendo un derecho de todos. El periodista la necesita por su profesión. El docente, también. Y yo también, claro.

Disiento con que ya no tiene sentido cómo falla la Corte, pese a que comprendo tu razonamiento (tuve que pensar un poquito sobre la convergencia tecnológica…). Si la Corte fallara a favor de la constitucionalidad (como ven, insisto en mantener una lucecita de esperanza) se tendría, y ahí sí, un fallo histórico que implicaría abrir una hendija en el muro cerrado de las corporaciones. Y si lo hiciera antes de octubre (cosa en la que no creo, eso no lo creo para nada) el grupo Clarín terminaría dándole al gobierno un ámbito de instalación del tema que, como ustedes dicen, hoy está circunscripto a grupos restringidos.

Saludos,
Esther

Ricardo dijo...

Tilo: es cierto. Algunos debates que reptaban subterráneamente ámbitos académicos o politizados emergieron.

Esther: tengo entendido que no habían entregado previamente las preguntas los Supremos. Estaban contempladas exposiciones. Quizás por eso, confrontados, los representantes de Clarín naufragaron un poco.
Yo también quiero tener alguna esperanza de un fallo favorable, pero el pesimismo de la razón le gana al optimismo de la voluntad. Por lo que pude leer, el fallo favorable podría incluir constitucionalidad + indemnización para Clarín. Veremos.
Gracias.

don Sudaca: muy bueno eso de que Clarín se tomó en serio lo de 1 canal.
Respecto a lo que marcás, coincido. Me refiero en el post a la libertad de expresión y a la libre competencia desde la bastardeada manipulación que hacen de los términos desde Clarín o el relato liberal: competencia piden los que saben que ya ganaron, claro, je.

Abrazos.