Acuartelamiento, saqueos y la Fiesta de la Democracia

Vamos a decir primero lo incómodo y sin anestesia: hay que aplazar la celebración del 10 de diciembre hasta que se hayan resuelto los acuartelamientos policiales y hayan cesado los saqueos (o el peligro de ellos) en todo el país.

Ahora sí, pueden dejar de leer y pasar a decirme cosas lindas en los comentarios. Los que no, acompañenme con algo de paciencia en algunos razonamientos:

1. Debatir medios, coberturas, magnitud de los saqueos, responsabilidad o irresponsabilidad policial y pases de facturas provinciales o nacionales, mientras hay saqueos pero, fundamentalmente, mientras hasta gente muy asustada, no es sólo improductivo sino directamente estúpido: solucionemos primero la emergencia y debatamos luego lo que quieran. Si les parece: nueva legislación, recomposición de la autoridad, de la cadena de mando, las conexiones narcos de algunas policías, la responsabilidad de la Justicia, los límites para intervenciones nacionales, etc. Pero después.

2. Repetimos que es una estupidez pretender impugnar los saqueos, choreos, o como quieran llamarlos (remitirse al punto 1 quienes busquen un debate semántico), desde la superioridad moral del “roban LCDs y no comida". Primero, porque no conduce a ninguna aproximación hacia la comprensión de los problemas subyacentes; segundo porque no involucra ninguna posible respuesta política a éstos; y tercero -y más importante-, es un modo de extirpar la dimensión humana de los saqueadores para justificar el pedido de represión. Empecemos, por lo menos, por reconocer eso. Cualquiera que se haya acercado a 100 metros de una facultad de ciencias sociales sabe que el hombre no es sólo una unidad biológica sino que comprende aspectos sociales, culturales y espirituales. Nadie vive sólo de proteínas, carbohidratos y lípidos: los deseos nos hacen también humanos. Y si decimos que en una sociedad consumista, como la nuestra, algunos no tienen derecho a desear bienes materiales estamos, lisa y llanamente, excluyéndolos. ¿O sólo aquellos -nosotros- con un buen pasar económico tienen -tenemos- derecho a consumir?

3. En este contexto de violencia en algunas ciudades como Córdoba capital y Concordia (Entre Ríos), y ante la posibilidad de que se reproduzca en otras, no hay mucho espacio político para ningún tipo de celebración, importante como son los 30 años de la recuperación democrática. Menos aún para el kirchnerismo, que hizo de lo autocelebratorio casi una bandera (en ese estigma reside no poco de la pérdida de representatividad de 2011 a las legislativas de este año). Sí, ok, es el discurso de Clarín. Sí, ya se, implica responsabilidades para el gobierno nacional (que ya las está asumiendo, en negociación con las provincias). Sí, implica también recursos, pero aquellos que hayan leído o visto Game of Thrones habrán escuchado hablar de “la paz del Rey". Que la búsqueda de ésta no nos encuentre como a Jeoffry Baratheon (Lannister), recibiendo de la plebe un tortazo en la cara en el camino de retorno al castillo. La solución posible y deseable no es otra que la representación. Hay que escuchar a la más maravillosa de las músicas.