jueves, 26 de mayo de 2011

Norberto Galasso, sobre mayo de 1810


Reportaje aparecido en la revista "La Educación en nuestras manos" (N° 76, junio de 2006):

La Educación en nuestras manos: La proximidad del bicentenerario de la Revolución reaviva la polémica alrededor de nuestra historia. ¿Qué sucedió en mayo de 1810?

Norberto Galasso: Nosotros tenemos la interpretación tradicional que ha dado Mitre de que el movimiento de Mayo se trataría de un movimiento surgido independentista, es decir dirigido a romper vínculos con España como consecuencia de un fuerte odio a lo español, que implícitamente estaba relacionado con el comercio libre. Esto a los maestros les genera un cierto problema porque siempre aparece uno de esos chicos listos que pregunta ¿y por qué la independencia se declara seis años después?, o ¿por qué el día 26 la Primera Junta jura por Fernando VII?. La explicación que se dio en otros tiempos era que fue una “máscara”, una farsa dirigida a esconder el propósito independentista que estuvo desde el principio. Yo estoy convencido que la interpretación más correcta es la que da Alberdi. El dice que al producirse la Revolución Francesa, ésta conmueve a la sociedad española, de una manera paradojal porque Napoleón invade España y los españoles enfrentan a Napoleón constituyendo Juntas populares. El pueblo español se levanta contra los invasores pero también con un reclamo contra la inquisición, contra los grandes hacendados; es decir la lucha contra Napoleón, a partir del 2 de mayo de 1808, se convierte en una especie de revolución española análoga a la francesa del 89. Alberdi dice que cuando las juntas populares se organizan en la Junta Central de Sevilla, una de las primeras cosas que decide es considerar que las tierras americanas no son colonias sino provincias; e incluso hay comunicados diciéndoles que deben eliminar los virreyes y darse juntas populares como en España. La revolución española se prolonga en Hispanoamérica y la de Mayo es un detalle o un momento de la revolución hispanoamericana.

¿En qué se basa esta interpretación?

N. G.: Cuando se festeja el Sesquicentenario de la Revolución de Mayo el Congreso publica la “Biblioteca de Mayo” y empiezan a aparecer documentos con cosas que se desconocían. Es tradicional decir en los colegios que French y Beruti repartían cintas celestes y blancas, pero resulta que los testigos de esto dicen que ellos repartían cintas blancas y rojas, y que los últimos días -el 24 y el 25- eran rojas únicamente en señal de amenaza de sangre. Y además repartían estampitas con la efigie de Fernando VII. Esto era lo mismo que estaban haciendo los revolucionarios españoles en España, porque habían tomado a Fernando VII como lo más rescatable de la familia real y como el posible modernizador de España. Hoy se está reconociendo que lo de la máscara fue un invento, porque se juró por Fernando VII en Chile, en México, en Nueva Granada. No es que se pusieran de acuerdo sino que sería una prueba de que la revolución en América sería una prolongación de la revolución española. La clave sería, entonces, que en Buenos Aires se desplaza al Virrey, elegido por el absolutismo de una monarquía fundamentada en el derecho divino, por una junta popular donde, por ejemplo, hay españoles; tendría una gran semejanza con la Revolución Francesa. Esto desmentiría lo que dice Mitre de que la Revolución se hace en contra de España, se hace en realidad contra el absolutismo español que no es toda España.

¿Por qué se produce la independencia en 1816?

N. G.: España recién envía fuerzas militares a Latinoamérica en 1814, hasta entonces la lucha es entre los Virreyes y los sectores reaccionarios, y los sectores revolucionarios. Por ejemplo, hasta 1814 ondeaba la bandera española en el Fuerte, y cuando nace la hija de San Martín en 1816 él la declara como española. Ahora, la Revolución española se acaba en 1813, 1814, cuando se derechiza toda Europa: se impone la Santa Alianza, vuelve la monarquía y vuelve la Inquisición. San Martín, a partir de 1814 empieza a presionar por la independencia y esto explica que ésta se haga en 1816. Hay un texto de la gente del Congreso de Tucumán que se refiere a estas cuestiones y dice que lo que se hizo en América se hizo de buena voluntad hacia Fernando VII, esperando que se democratizase España, en cuyo caso no habría habido separatismo ni política independentista. Como España vuelve al absolutismo no hay otra solución, para no caer bajo el régimen medieval o de la nobleza, que declararse independientes y levantar las ideas de la participación popular, de la democracia.

¿Qué rescatar de todo este proceso?

N. G.: Si uno considera la Revolución de Mayo desde esta perspectiva lo que ve es que no es un fenómeno aislado del resto de América latina, porque se produce en abril en Caracas, en mayo en Buenos Aires, en setiembre en Santiago de Chile y en México, y antes, en 1809 un frustrado intento en La Paz. Es decir, forma parte de un proceso donde, entre 1809 y 1811, toda América hispana se levanta. Y se levanta con una fuerte participación popular. Se ha dicho que los que estuvieron en el Cabildo Abierto eran nada más que los propietarios de Buenos Aires, ahora se sabe que los revolucionarios hicieron tarjetas truchas, entonces había muchos que no eran “vecinos respetables”. Cisneros se escandaliza y en una comunicación con España dice “votó gente que no era nadie”. Y además estaban allí algunas de esas figuras que cuando se produce una crisis en la sociedad dejan su vida doméstica y se convierten en revolucionarios. Como French, que era un cartero que repartía cartas y se convierte en un agitador de primera línea, o Beruti que era un empleado del Estado, o Donado que era un gráfico, o Pancho Planes -un pariente de López y Planes- que es quien en el Cabildo Abierto, cuando algunos decían que el virrey se tenía que ir, dice “el virrey tiene que ser ejecutado porque fue el que reprimió a nuestros compatriotas en 1809 en La Paz”. Personajes que han sido escamoteados porque la versión del poder es una versión liberal conservadora. Llamémosle revolución democrático burguesa, llamémosle revolución de liberación nacional, llamémosle revolución modernizadora, lo cierto es que fue un salto de la sociedad argentina a nuevas formas de participación, crecimiento económico, distribución del ingreso, derechos del trabajador. Todo esto está en ciernes en estos sucesos. Hay que verlo como una larga lucha que no ha terminado y que hay que continuar.

San Martín ¿agente inglés?

N. G.: A partir de una interpretación que hace el Dr. Sejean se abre toda una polémica. El dice que si San Martín llegó a España a los 6 años y volvió al Río de la Plata a los 34, era un hombre modelado por España. La explicación que él encuentra al hecho de que este teniente coronel del ejército español venga al Río de la Plata a pelear contra el ejército español es que cuando San Martín pasó por Londres lo sobornaron. Con lo cual tendríamos un padre de la patria agente inglés. Yo creo que San Martín viene a Buenos Aires porque él era un oficial del Ejército español que como tantos otros, como por ejemplo Alvear o Chilavert que vienen con él en la fragata Canning, estaban influenciados por las ideas de la Revolución Francesa y estaban apoyando a la Junta Central de Sevilla en 1810. Cuando esa Junta es desplazada por el Consejo de Regencia, lo que fue una derechización del proceso español, ellos se dan cuenta que lo mejor es seguir luchando por esas ideas de libertad, igualdad y fraternidad -lo que San Martín llama el Evangelio de los Derechos del Hombre- en América. Venía a luchar por esas ideas, no contra lo español, porque lo español estaba escindido en dos bandos: había liberales revolucionarios y había absolutistas. La única manera de explicar que San Martín no es agente inglés es explicar que la Revolución tiene un contenido distinto del que planteó Mitre. Lógicamente es muy difícil polemizar y discutir porque, como decía Homero Manzi, Mitre es el único prócer que dejó un diario de guardaespaldas.

Fuente

9 pusieron huevos y comentaron:

El Mostro dijo...

¡Excelente artículo!
Siempre me pareció que se trataba de una guerra civil, entre revolucionarios y absolutistas.

Saludos.

Ricardo dijo...

Gracias, Mostro.

Saludos.

Jonás dijo...

Ayer en 678 estuvo Galasso con el mitrista de O`donell, que bueno que hubiesen debatido de estas cosas no?

Jonás dijo...

Estuve haciendo un laburito hace tiempo en el cual me rendi en la mitad por lo obvio pero que tal vez continúe.
El plagio de O'donnell a Galvez en la biografía de Rosas.
¡que fácil escribir libros así!
¡ay si tuviera un apellido de esos!

Ricardo dijo...

No lo pude ver al programa pero sí, algunas cosas son más fáciles teniendo apellido.

Un abrazo.

H.M. dijo...

Excelente!!!
Galasso es imperdible por la claridad de razonamientos y la sencillez con que los explica...
Gracias por traerlo...
O'Donnell dice lo que quiere escuchar la audiencia... "adorna" y "maquilla" sus argumentos a gusto del consumidor...

Ricardo dijo...

Gracias a vos por pasar y comentar, Hilda.

MiTucumán dijo...

¡¡¡Buenísimo!!!
Es justo lo que pienso sobre todo los que puede ser bueno en una sociedad y termina siendo malo: agricultura, minería, petróleo, industria, comercio, salud, educación… será bueno o malo dependiendo de la " …formas de participación, crecimiento económico, distribución del ingreso, derechos del trabajador…" justamente eso mismo que se intentó mejorar con la revolución de mayo y seguimos intentándolo hasta hoy.

Ricardo dijo...

Muy de acuerdo, MiTucumán.

Abrazos.